La Junta cierra la piscifactoría de Quintanar y lleva las truchas a León

R. Travesí / Burgos
-

La Delegación Territorial habla de «cese temporal» con la reorganización de los recursos, que afectará a dos trabajadores. La medida afecta a una instalación en Soria y a otra en Palencia

Imagen de archivo de la visita de unos aficionados a la pesca a las instalaciones de Quintanar de la Sierra. - Foto: Javier Martínez

La obsesión de las administraciones públicas por reducir costes no tiene límite y llega a todos los ámbitos. Incluso al de las truchas. La Junta de Castilla yLeón tiene previsto el cierre de la piscifactoría de truchas que explota en Quintanar de la Sierra a finales de este mes. Fuentes de la Delegación Territorial aseguran que no se trata de un cierre sino de un «cese temporal», que traerá consigo una reorganización interna de los recursos y que forma parte del Plan de Optimización de los Recursos, que busca mejorar la eficiencia y la eficacia. En todo momento, comentan que el servicio que se presta no se verá afectado porque queda «totalmente garantizado».

El cierre o «cese temporal» de la piscifactoría de Quintanar ‘La Pesquería’ no será el único en la Comunidad Autónoma sino que también afectará a otras instalaciones de las provincia de Soria -en la localidad de Ucero- y Palencia -Celadilla del Río-. La garantía del servicio, de la que habla la administración regional, está relacionada con que las truchas existentes en estos lugares irán a parar al Centro Piscícola de Vegas del Condado, en León.

En las próximas semanas, se procederá al traslado de los ejemplares a esas instalaciones leonesas. Todas ellas son piezas de trucha común autóctona, tanto madres como alevines, que -una vez realizado su engorde- sirven para repoblar tramos de río con baja productividad y así asegurar la supervivencia de la especie.

Lo que no está decidido es el futuro de los dos operarios que trabajan en la piscifactoría de Quintanar, un funcionario y otro laboral, que residen por la zona. Empleados que desconocen los planes de la Junta, aunque uno de ellos precisa que había rumores desde hace tiempo sobre el posible cierre de la instalación.

La alcaldesa de Quintanar, María Montserrat Ibáñez, manifestó que nadie de la Junta le había comunicado nada sobre el futuro de la dotación.

informe de gasto. La Consejería de Fomento y Medio Ambiente solicitó hace unos meses a los técnicos de cada servicio que realizaran un informe con los gastos que suponían las piscifactorías existentes en Castilla y León. El objetivo era analizar la viabilidad económica de cada instalación. Hablamos de dotaciones con escaso presupuesto, que se centra  en el pago de las nóminas de los empleados y la compra de piensos, para alimentar las truchas.

La decisión de la Junta llega después de que en 2006 invirtiera un millón de euros en la mejora de la piscifactoría de Quintanar, con la rehabilitación de tanques. Además, la Consejería siempre ha sido partidaria de que la pesca deportiva, entendida como una afición, cree riqueza en el entorno de los ríos al potenciar el turismo de las zonas. Las cifras hablan de que esta práctica genera más de 100 millones de euros en la región.

En la actualidad, la Comunidad es líder al contar con cerca de 200.000 licencias, después de unas temporadas en que el número de seguidores había bajado ligeramente. El año pasado, Burgos cerró con algo más de 7.000 licencias, solo superada por las provincias de Zamora y León.

En los últimos meses, los aficionados han contado en Castilla y León con 47 cotos de pesca y 23 escenarios deportivos sociales, repartidos en los más de 7.000 kilómetros de la red fluvial de los que buena parte son consideradas aguas trucheras.