Marc Augé: «La utopía de hoy es la de la educación»

I.L.H. / Burgos
-

Para el etnólogo la crisis no es solo económica, sino que abarca 3 aspectos: el concepto de planeta, las relaciones y los fines a perseguir

El etnólogo y antropólogo francés (i) junto al decano de Humanidades, Ignacio Fernández de Mata. - Foto: Jesús J. Matías

El siglo XXI ha dejado atrás -o casi- el lugar antropológico, ese concepto que define algo parecido a un pueblo tradicional en el que se corresponde el espacio habitado con la vida social. Hasta ahora el lugar antropológico servía para describir a su sociedad. Sin embargo, en los espacios que la vida del siglo XXI ofrece no es posible hacer esa lectura. De ahí que el antropólogo y etnólogo Marc Augé acuñara el término «no lugar» para referirse a los espacios de transitoriedad que no tienen suficiente importancia para ser considerados como «lugares» y que únicamente responden al pasar del individuo: una autopista, una habitación de hotel, un aeropuerto, un supermercado...

Las nuevas tecnologías, las redes sociales y el poder de las pantallas ha creado un tercer tipo de «no lugar», tal y como Marc Augé explicó ayer en el diálogo que mantuvo con el decano de la Facultad de Humanidades, Ignacio Fernández de Mata dentro del I Foro de la Cultura: «Los espacios de comunicación son lugares virtuales que pretenden establecer relaciones. Pero en realidad el gran tema es conocer qué tipo de relaciones establecen estos espacios. Porque hay riesgo de perder la relación simbólica a través de las llamadas redes sociales por la ubicuidad e instantaneidad que requieren», resumió en una conversación pausada y en un fluido español.

«Estamos en un mundo particular en el que es necesario el reconocimiento. Necesitamos ver en la tele a las personalidades, necesitamos reconocerlas en la pantalla, aunque eso no signifique que las conozcamos. De ahí que me pregunte: ¿Estamos en la Edad de la Pantalla? Nos reconocemos en las imágenes. Ahora lo ideal es ser visto en la pantalla», subrayó en la charla que mantuvo en el aula Romeros, ante un aforo mayoritariamente universitario.

De fracasos y futuro. El autor de  libros como Futuro, La comunidad ilusoria o Los no lugares. Espacios del anonimato. Antropología sobre la modernidad destacó el momento en el que vivimos como el de una sociedad que defiende la ideología del presente y en el que ya no hay espacio para las utopías. «El siglo XXha sido un tiempo de desilusión en el que hemos comprobado cómo fracasaban las utopías sociales que provenían del XIX. Aquellas que en su día fueron una revolución y aludían a mitos de futuro no existen en la humanidad de hoy. ¿Se puede hablar de una nueva forma de utopía? Creo que no. Las redes sociales son muy potentes, pero depende de la finalidad que les queramos imaginar. La ilusión es pensar que por sí misma la comunicación puede crear un mundo; pero es un mundo de ficción, de imágenes, y finalmente, de soledad».

Analizando el presente y a la sociedad que lo da forma, el investigador no puedo referirse al momento de crisis que atravesamos, que en su opinión no es solo económica. Para Marc Augé la crisis actual tiene tres aspectos a tener en cuenta. Es una crisis planetaria «en la medida que hemos tomado nueva conciencia del finito del universo; es una crisis de las relaciones, con una mayor distancia entre ricos y pobres y una era en la que nos reconocemos pero no nos conocemos, y es una crisis de las finalidades, teniéndonos que responder a la pregunta de qué hacemos sobre la Tierra. «En realidad -adelantó Augé-, esa sería la utopía de hoy:la utopía de la educación». El conocimiento es, a su juicio, lo que salvará al ser humano, pero para eso no hay duda de que hay que apostar por él.