La próxima semana se acaba la ‘política de casco’ a cuenta de las restricciones de la precampaña electoral, así que el alcalde, Javier Lacalle, continúa en el escaparate de obras públicas de la recta final de la legislatura, y ayer paró en la de mayor calado: la de la conversión de la plaza de toros de El Plantío en el Coliseum Burgos, espacio multiusos en cuya restauración y adaptación se invierten 5,6 millones.

Según explicó el jefe del Ejecutivo local, la certificación de obra supera el 50%, pero el avance de las últimas semanas y la construcción de todos los prefabricados (incluyendo la cúpula y la fachada) eleva el porcentaje de ejecución «al 70%». «Estará terminada en la segunda quincena de mayo» dijo sobre la actuación, momento que aprovechó para avanzar que la inauguración coincidirá con la feria taurina de los Sampedros, si bien «las primeras entradas que saldrán a la venta» serán las del partido que la selección española de baloncesto jugará el 18 de agosto en su preparación para el Europeo de septiembre.

El alcalde, acompañado del titular de Fomento y Deportes, Ángel Ibáñez, explicó a la prensa los cambios más notables de la dotación. Amén del saneamiento y refuerzo de la estructura original, comprobó la colocación del primero de los tres anillos que sujetarán la cúpula, el avance del ‘añadido’ en la fachada oeste que permitirá instalar ascensores hasta los palcos para personas con discapacidad, la apertura de una nueva ‘puerta grande’ y un vomitorio auxiliar de evacuación del aforo de pista, la construcción de una ‘escena’ de hormigón para acunar distintos tipos de pavimento o la estructura que sujetará la nueva fachada del inmueble, que mutará por completo su aspecto tradicional.

En operatividad

No habrá, por tanto, posibilidad de estreno preelectoral, aunque Lacalle sí planteó ayer la posibilidad de realizar «jornadas de puertas abiertas para grupos reducidos» antes del estreno en las fiestas mayores. Después de los toros vendrá el momento de demostrar que el espacio es, efectivamente, multifuncional.

Una prueba de fuego será la visita de la selección de baloncesto, pero el equipo de Gobierno también reconoce que se han intensificado los contactos con «empresas de espectáculos que antes no podían acercarse a Burgos» por no contar con un lugar adecuado para la celebración de eventos.

De hecho, ya se rechazó hace semanas la posibilidad de inaugurar la instalación con un concierto de Julio Iglesias a mediados de mayo. La incertidumbre sobre el fin de la obra obligó a declinar esta oferta, pero ya se manejan otras fechas para que, más pronto que tarde, se puedan celebrar conciertos de cierta relevancia en el Coliseum.