La inspección ocular practicada en el domicilio asaltado, una segunda vivienda que se encontraba deshabitada en ese momento, demostró que habían accedido al interior forzando una ventana, produciendo desperfectos en el cerrojo para poder entrar.La investigación abierta el pasado mes de febrero, dirigida al esclarecimiento del hecho y a la identificación, localización y detención -llegado el caso- del autor o autores, ha dado ahora sus frutos al poder vincular a un menor con los hechos denunciados, siendo investigado como presunto autor de un delito de robo con fuerza en las cosas.La investigación sigue abierta pendiente de la recuperación del material sustraído: una desbrozadora valorada en 1.100 euros y herramientas.