El horario que estableció la Comisión de Garantías de Videovigilancia de Castilla y León, que luego confirmó la Delegación de Gobierno, para autorizar las cámaras en las zonas de copas de Burgos es insuficiente a juzgar por el suceso ocurrido el pasado domingo por la mañana en Las Bernardillas. De estar ya en funcionamiento los dispositivos no hubieran podido grabar nada, pues a las 10,40, cuando se produjo la reyerta tumultuaria, habrían estado apagados. El permiso concedido al Ayuntamiento fijó unos días concretos para activar los sistemas -jueves, viernes, sábados y domingos, festivos y sus vísperas- a unas horas determinadas, de 10 de la noche a 10 de la mañana.
El concejal de Nuevas Tecnologías, Eduardo Villanueva, avanza que el Ayuntamiento que cuando llegue el momento de renovar la autorización solicitará a la Comisión de Videovigilancia que se replantee la restricción y apruebe la utilización de los dispositivos todos los días de la semana durante 24 horas. En su opinión, la privacidad de los ciudadanos está protegida por cuanto las imágenes grabadas solo pueden ser utilizadas por requerimiento judicial.
En su opinión, no sería lógico que el Ayuntamiento realizara una inversión importante para llevar a cabo toda la instalación -en torno a 500.000 euros, se baraja- para que después «haya altercados que no puedan ser grabados porque existe la obligación de apagar las cámaras en un horario concreto y unos días determinados». El suceso del pasado domingo por la mañana «demuestra que este tipo de peleas pueden ocurrir en cualquier momento del día en las zonas de ocio de la capital».
La autorización al Ayuntamiento deberá ser renovada en el mes de noviembre del año que viene, antes de que el Consistorio pueda colocar y poner en marcha los dispositivos, ya que a lo largo de este año se redactará el proyecto, se adjudicará y se contratará a la empresa que gestionará los sistemas. Por tanto, Villanueva confía en contar con los nuevos horarios cuando estén funcionando.
En las Bernardillas, la zona de ocio de Gamonal situada en la plaza de Roma donde se produjo el pasado fin de semana la espectacular pelea, se instalarán tres cámaras. En la parroquia de San Pablo, a la altura del pub Neptuno, la primera. La segunda, en la calle Arzobispo de Castro, en una farola frente al número 13. En la plaza de Roma iría la tercera, encima del pub O’Connor. Según explica Villanueva, estos dispositivos habrían tomado «perfectamente las imágenes de estar activadas».
La zona de ocio de Burgos que más cámaras tendrá será la de Las Llanas, con un total de nueve dispositivos. Dos de ellos se colocarán en la plaza de la Flora, uno en la esquina con la calle Fernando III el Santo y otro en la Escuela de Hostelería. En la Llana de Afuera irán otros dos, uno en la esquina con Cardenal Segura y la otro en el Edificio Joven. En la Llana de Adentro están previstos tres, en las traseras del pub Oliver. La octava cámara estará en la calle San Gil, esquina con Fernán González. Y la última, en esta misma vía, a la altura de la plaza de los Castaños.
En las Bernardas están previstas cuatro. Una de ellas en la calle Calzadas, en la esquina de la Escuela de Música. La segunda en esta misma vía, en la esquina de la farmacia. La tercera y la cuarta, en la farola central de la plaza de Bernardas, en la parte baja, donde hay tres bares abiertos.