Guías turísticos del pasado

I.M.L. / Aranda
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El estreno del recorrido teatralizado por el plano de 1503, del que toman su nombre, sirvió como ensayo general de este recurso para visitantes y vecinos • Los protagonistas se sumergieron en una investigación de corte policial

La recoleta plaza del Romualdillo sirve de improvisado escenario para representar el juicio del plano de 1503. - Foto: DB

A mitad camino entre una visita turística y una novela de detectives, con toques que recuerdan vivamente un gran clásico como El nombre de la rosa. Así se podría definir muy sucintamente las visitas teatralizadas que se estrenaban ayer y que se llevarán a cabo hasta el próximo 15 de noviembre en la capital ribereña y que tienen como base argumental el plano de Aranda de 1503. Tanto es así que este documento que formó parte de un proceso judicial ante los Reyes Católicos se convierte en un protagonista mudo pero ineludible tanto en la trama como en el desenlace.

La visita tiene como punto de partida la representación del plano de la Plaza Mayor. En su templete, los participantes, identificados con un pasaporte y con una reproducción del plano en la mano, conocen al Maestro y a su ayudante, Adso (sí, como el de Guillermo de Baskerville en la obra de Umberto Eco), que les plantean un enigma y les invitan a echarles una mano para solucionarlo entre todos. Y la investigación gira en torno al plano y a todo lo que sucedió en la villa arandina en aquellos primeros años del siglo XVI, aderezado con el vino de la Ribera del Duero muy presente.

Jalonado con bromas, estos dos personajes van pintando una estampa fidedigna de lo que era Aranda y sus habitantes, tanto en el aspecto urbano como en el social, y no dudan en plasmar en sus diálogos y monólogos los problemas de una villa que ya era más que floreciente. Entre los escenarios de esta visita teatral, que se acerca más a un viaje en el tiempo, la comitiva pasa por la plaza de la Sal, la iglesia de Santa María, la plaza del Trigo, el callejón del Pozo no podía faltar, la plaza del Romualdillo, el Arco Pajarito y el puente románico. Este recorrido no es algo caprichoso, sino que los personajes están siguiendo las pistas que dejó el autor del plano de 1503, que les va llevando por estos puntos sobre el documento histórico, perfectamente reconocibles en el trazado actual de las calles arandinas. «En el plano de hallaréis», dice la leyenda que dejó escrito el artista. El objetivo final es resolver un misterio de la historia y, para ello, Maestro y Adso piden la colaboración de los asistentes, incluso cuando pretenden recrear el proceso judicial con sus testimonios reales incluidos.

Esta visita gratuita se va a llevar a cabo todos los días, excepto los lunes, de martes a viernes a las 19 horas, y los sábados, domingos y festivos a las 13 y a las 19 horas, retrasando el horario vespertino a las 20:30 horas en julio y agosto. Los interesados en acudir a uno de estos recorridos, ya sean visitantes foráneos o vecinos de la capital ribereña, puede pasar a apuntarse en la Oficina de Turismo de la capital ribereña.