El primer equipo de baloncesto masculino de la provincia afronta la recta final de la Liga regular en una situación envidiable y con el ascenso a ACB como sueño alcanzable. Deportivamente es muy posible, otra cuestión serán las negociaciones en los despachos. Aspecto muy complicado, y más teniendo en cuenta las dos experiencias anteriores, que resultaron frustrantes. Sin embargo, el presidente, Miguel Ángel Benavente, mantiene su optimismo habitual y confía en hacer realidad el anhelo largamente demandado por la afición, un CB Tizona Autocid compitiendo con la élite nacional.

En la primera vuelta el equipo sufrió varios traspiés. ¿Llegó a tener dudas?

No; y menos después de la buena pretemporada que había hecho. La derrota en Lugo sembró dudas en el equipo y sus consecuencias fueron las posteriores ante Coruña y Palma. La de Ourense creo que fue más por el acierto excesivo del escolta (Tyler Brown), que fue en el único partido en el que destacó; de hecho, ya no sigue. Andreu ya lo había dicho, que a pesar de la buena pretemporada el equipo no estaba al nivel deseado. Con paciencia y trabajo todo se ha solucionado.

Pero ¿perdió la confianza?

No. Sabía de la calidad de todos los jugadores y nunca dudé. Además, la Liga no es una carrera de un día. Sube el más regular.

El equipo está en buen momento; ¿ve posible el ascenso deportivo directo?

Claro que hay posibilidades. Quedar campeón está en nuestras manos.

¿Prefiere play off o ascenso directo?

El ascenso directo te quita el play off, que es bonito para la afición, porque se viven partidos muy intensos y emocionantes; además, económicamente también ayuda.

Entonces, ¿prefiere el play off?

No. La competición premia al más regular con el ascenso y el play off entraña su riesgo. Baste recordar lo que nos pasó hace unos años con el Cáceres. El play off es peligroso.

De cualquier forma, quedan tres meses para acabar la temporada. ¿Cómo va allanando el camino a ACB?

Estamos trabajando, aunque las cuestiones no van al ritmo que nos gustaría. Me refiero al Tribunal de los Derechos de la Competencia. Nos dicen los expertos que el tema puede ser el más eficaz, pero está claro que falta agilidad. Esto nos perjudica.

Exactamente, ¿qué reclaman a este Tribunal?

La competencia desleal contra el derecho deportivo a ascender. Nosotros vamos como club, pero es un tema similar al de la Asociación de Futbolistas. Ellos defienden la libertad individual para trabajar y en nuestro caso el derecho como Sociedad Anónima Deportiva, que no deja de ser una sociedad mercantil.

¿Están sondeando otras opciones?

Sí. Persiste el tema de la adquisición y/o fusión de otra SAD, a pesar de que en su día ya nos dijeron que estábamos comprando un pleito; pero nosotros no tiramos la toalla. Entre lo uno y lo otro vamos a ver si lo conseguimos.

¿Han vuelto a mantener conversaciones con Tenerife?

No. Ahora es otro equipo. Llevamos unos meses conversando y prácticamente ya hay preacuerdo.

A pesar de la amenaza de ACB, ¿siguen barajando esa opción?

Sí. Ahora lo estamos haciendo con más tiempo. Con la fusión del CIF pensamos que puede allanarse el camino. Es cierto que nada es perfecto y que en todo hay problemas.

¿Es un equipo de la península?

Sí, pero no puedo decir cuál. Nos han pedido que hasta que no firmemos los documentos no digamos nada porque de lo contrario pueden surgir problemas añadidos. También es cierto que ha cambiado la Ley de Sociedades y eso ahora lo hace menos atractivo. Creo que lo más efectivo es el Tribunal de la Competencia. Además, los aficionados han iniciado una campaña de recogida de firmas, entiendo que las enviarán al Consejo Superior de Deportes. Es otra manera de hacer presión y nosotros se lo agradecemos. Creo que no deben firmar solo los aficionados sino toda la población de Burgos.

¿Han iniciado el diálogo con las instituciones por los apoyos si se sube deportivamente?

Ahora vamos a volver a intensificarlo. Nunca lo hemos dejado pero no está clarificado. En cuanto al polideportivo, siguen las obras en la Plaza de Toros pero desde el club desconocemos el proyecto.

¿Y el tema económico?

De momento, nada; aunque habrá que empezar. Vamos a ir con tiempo; no con hechos consumados. Espero que las elecciones no nos perjudiquen; así que habrá que adelantar los tiempos y el calendario de reuniones y compromisos.

¿Han hablado con empresas y/o posibles patrocinadores?

Hablamos con nuestros colaboradores, pero nos gustaría que este proyecto fuese cogido por la ciudad. Yo, personalmente, me veo un poco limitado por mi posición en la FAE (es el presidente). No lo quiero utilizar y a este respecto lo evito. En este caso la dualidad no es buena. Es un proyecto de todos, que la ciudad recibe. Hay un estudio de una universidad de Andalucía que dice que el deporte genera millones de euros en esa comunidad. Hay otro de la Universidad de Vigo que destaca el dinero que deja Obradoiro. De todas las formas, ya se sabe que una ciudad industrial es menos proclive a apoyar que una ciudad de servicios.

Hay gente que habla de una tercera decepción. ¿La ve posible?

Esa pregunta nosotros no nos la hacemos nunca. Eso es como pensar: si no voy a ser ministro ¿para qué voy a estudiar? Nosotros aspiramos a lo máximo que esté al alcance de la mano. Deportivamente hemos puesto todos los medios.

Y ¿económicamente?

El esfuerzo económico no está al alcance de nuestra mano. Hay que entender que esto no es el coto privado de 8 o 9 personas, sino que es un proyecto de ciudad. Es evidente que damos satisfacción a nuestra afición y que hay en muchos sitios de España donde se pone a Burgos como ejemplo de la injusticia que estamos sufriendo. Igual con más presión empiezan a cambiar las cosas. ¿Quién iba a pensar que la reclamación de Bosman iba a terminar en Ley? Quizás algún día hablemos de una Ley Autocid. Siempre hay esperanza y en nuestro empeño está revelarnos contra la injusticia.

Por último, ¿qué opinión le merece el deseo del Gobierno de que tribute a Hacienda el deporte base?

Están confundiendo muchas cosas. En la economía sumergida se están moviendo más de 20.000 millones de euros y ponen el ojo en la gente que desinteresadamente ayuda en el deporte. Además, habría otro problema. Las cotizaciones se hacen por vía telemática, lo que obligaría a los clubes a contratar a un administrador. Pienso que eso es matar moscas con cañonazos. De aprobarse esa ley ¿también entrarían los voluntarios de mundiales y olimpiadas? Hay demasiados problemas que resolver como para crearnos otros innecesarios.