El Papa pidió ayer a los fieles ser «servidores unos a los otros» y posteriormente lavó los pies a una docena de enfermos, en una breve e improvisada homilía durante la misa in Coena Domini de Jueves Santo, en la que también subrayó que Dios se ha hecho «siervo y servidor» y apuntó que esta es su principal «herencia».

En la misa celebrada en la Fundación Don Carlo Gnochi- Centro Santa María della Providenza, Francisco pidió a los asistentes que se den «amor» y sean «servidores» porque es la «herencia de Jesucristo».

Ante los enfermos, el personal de la organización, algunos voluntarios y familiares, el Pontífice afirmó que «lavar los pies» es un gesto «histórico» que los esclavos hacían «porque las calles eran de arena en esa época y cuando se entraba en casa tenían que limpiarse esas extremidades».

Con palabras directas y sencillas puso de manifiesto que la Iglesia conmemora con este acto «la Última Cena de Jesús» cuando instituye la Eucaristía. A continuación, anunció que se iba a disponer a lavar los pies a algunos de los enfermos y solicitó a los asistentes que pensaran «cómo ayudar, cómo servir al otro». «Jesús hace un trabajo de esclavo», comentó para pedir después ser «servidores unos a los otros».

Las 12 personas a quienes Francisco limpió los pies sufren lesiones ortopédicas, oncológicas y neurológicas, y tienen entre 16 y 86 años. Entre ellos, hay tres extranjeros y uno es de religión musulmana.

Antes de entrar en el edificio, el Papa recibió una calurosa bienvenida y saludó y bendijo una a una a todas las personas que le estaban esperando fuera del recinto.

La casa hogar de la Fundación Gnocchi fue creada por el sacerdote italiano Carlo Gnocchi, quien comenzó su trabajo acogiendo a niños mutilados y con discapacidad durante la Segunda Guerra Mundial, y fue beatificado por Benedicto XVI en el año 2009.

 

TRIDUO PASCUAL Con la misa Crismal celebrada en la Basílica de San Pedro se da comienzo el inicio del Triduo Pascual, en el que los católicos conmemoran la pasión, muerte y resurrección de Cristo.

Hoy, Francisco presidirá los Oficios en la Basílica de San Pedro. En esta ceremonia la homilía estará a cargo del italiano Raniero Cantalamessa, predicador de la Casa Pontificia. Por la noche, a las 21,15, participará en el tradicional Vía Crucis en el Coliseo. Los refugiados y emigrantes, los que sufren las consecuencias de la violencia, la crisis, la falta de empleo o la usura serán algunos de los temas que se meditarán en las Estaciones de Penitencia, cuyos textos han sido escritos por el arzobispo de Campobasso-Boiano Giancarlo Bregantini.

Mañana se celebrará la Vigilia Pascual a las 20,30 en San Pedro y el Santo Padre presidirá la Liturgia de la Luz en una basílica de San Pedro completamente a oscuras. La Misa del Domingo de Resurrección será en la Plaza de San Pedro y comenzará a las 10,15 y después Francisco impartirá la bendición Urbi et Orbi.

Por último, el 21 de abril, conocido como el Lunes del Ángel, el Santo Padre rezará a mediodía la oración mariana de Regina Coeli con los fieles y peregrinos que se