Los Montes Obarenes sufrieron ayer un incendio forestal que puso en riesgo buena parte de la masa forestal que rodea Pancorbo, Villanueva de Teba y Bozoó, y que afortunadamente pudo ser controlado con prontitud, ya que el fuerte viento que hubo ayer por la tarde en toda la zona hacía presagiar un desastre cuando minutos antes de las tres de la tarde llegaba el aviso de que el monte estaba en llamas.

A esa hora el vigilante del puesto de Mancubo (1.186 metros) detectaba las llamas en una zona de los montes de Pancorbo, junto a una de las varias torres de cables eléctricos que pasan por la zona. Un terreno en vaguada en la que conviven el monte bajo, los bosques de pinos y los de encinas, y en la que viven en semilibertad varias cabezas de caballos losinos, que de hecho pastan en la zona, lo que ayuda a que la capa vegetal sea mucho menor.

Allí se inició un fuego que según los indicios pudo originarse por uno de los cables eléctricos, ya que en la zona no se llevaban a cabo labores de labranza ni hay indicios de que sea intencionado. Además, el punto de origen del fuego es bastante evidente, junto a la torreta eléctrica, desde donde empezaron a expandirse las llamas por efecto de un viento que soplaba a fuertes rachas llevando el fuego hacia la cumbre.

La alerta tuvo inmediata respuesta, y hasta la sensible zona de montes (conocida como Villahermosa) se movilizaron diferentes recursos tanto de la Junta como de la Diputación, el Ministerio de Medio Ambiente y los ayuntamientos de Miranda y Burgos, conscientes de que los Obarenes son una superficie boscosa de grandes dimensiones en la que la combinación del fuego y el viento podía ser letal.

Los medios se encontraron por fortuna con un aliado muchas veces esquivo, como son los diversos caminos de acceso a la zona, ya que en lo alto, a escasos metros de donde se produjo el incendio, están varios repetidores y antenas, por lo que la llegada de los camiones autobomba y las cuadrillas fue muy rápida, logrando atacar el fuego con prontitud y desde diferentes flancos ya que los caminos se adentran por varias partes de bosque.

En suma se calcula que el perímetro del fuego alcanzó las 7 hectáreas, aunque la superficie quemada es menor, ya que quedaron islas dentro de ese perímetro sin arder tanto por la intervención de los profesionales como por el viento, que provocaba saltos de las llamas de varios metros.

Además de cuadrillas, agentes forestales y bomberos de varios parques (Miranda, Briviesca y Burgos), hubo apoyo aéreo, como los tres helicópteros (uno de coordinación y dos con carga de agua         -Villaeles y Pradoluengo- que se suministraron de una balsa de Santa María de Ribarredonda), y un dos hidroaviones de carga en tierra llegados de la base de Agoncillo (La Rioja).

En la zona, además algunos vecinos, el alcalde de Pancorbo, al que el fuego le pilló con el tractor trabajando en una finca y que  se mostraba muy preocupado especialmente por el viento. «La verdad es que se ha actuado con mucha rapidez y con una gran número de medios personales y materiales, hay que agradecerles a todos los profesionales el trabajo porque algunos no han podido ni comer, les hemos tenido que traer unos bocadillos porque les ha pillado en el cambio de turno», explicaba a DB al pie de la superficie quemada.

Los daños son escasos, y habrá que esperar para confirmar las causas del fuego y si son los cables eléctricos los responsables, así como la superficie final afectada. La Junta, en su parte vespertino, daba el fuego aún por activo, aunque el control ya era evidente entrada la noche. No obstante, el viento reinante hizo adoptar todas las precauciones y habilitar un retén.

La zona no es ajena a los incendios, ya que en el año 2001 se produjo uno de gravedad que afectó a más de mil hectáreas de monte bajo y de rastrojo, aunque en esa ocasión el viento también reinante ganó la partida.

Se mantiene el nivel 1 en Lomas de Villamediana. La Consejería de Medio Ambiente de la Junta mantiene el nivel 1 de Infocal en el incendio que desde ayer a las 14.45 horas afecta a la localidad burgalesa de Lomas de Villamediana, dentro del municipio de Alfoz de Bricia.

En las labores de extinción trabajan tres técnicos y siete agentes medioambientales, tres helicópteros, uno de Medina de Pomar y dos de Lubia; una cuadrilla helitransportada y seis de tierra; tres buldozer; cuatro autobombas, y bomberos voluntarios.

Fuego en la frontera entre Burgos y Cantabria. Efectivos de emergencias de la administración local, autonómica y estatal trabajan por tierra y aire en la extinción del incendio forestal declarado ayer en el monte Hijedo, que está afectando a roble y matorral de las provincias de Cantabria y Burgos. Hace 12 horas se estimaba que en Cantabria el fuego había quemado unas 300 hectáreas de monte.

Efectivos de la Unidad Militar de Emergencias llegado en la madrugada de este viernes a Valderredible para colaborar en las labores de extinción de un incendio que amenazaba a varios pueblos, en particular a Ruanales, si bien también corrían riesgo de desalojo Riopanero y Cejancas, aunque en menor grado. El Gobierno declaró ayer jueves el nivel 1 del INFOCANT.