La Concejalía de Nuevas Tecnología trabaja para implantar la red de conexión a internet inalámbrica desarrollada por el Ayuntamiento (Wifibur) en algunas líneas de autobuses urbanos de cara al próximo verano. 

Hasta el momento se han mantenido reuniones con el Servicio de Movilidad, Accesibilidad y Transporte Urbano (Samyt) para avanzar en este proyecto. «La Concejalía de Nuevas Tecnologías aportaría toda lo relacionado con la técnica y el asesoramiento, pero el presupuesto debe salir del Samyt», indicó José Antonio Antón, edil de Nuevas Tecnologías.

La idea es implantarlo como experiencia piloto en algunas de las líneas, aunque todavía no se sabe cuáles serán las elegidas, y posteriormente ir generalizándolo a todas ellas. 

Durante el año pasado un total de 8.773 personas se dieron de alta en Wifibur, que suman ya las 48.895 desde su implantación en junio de 2010. Los meses con más altas en 2013 fueron los de julio y agosto con 1.572 y 1.218, respectivamente.

El 53,81% de los usuarios de este servicio se conectaron a través del teléfono móvil; el 40,37%, por el ordenador y el 5,83% con tableta. Respecto al perfil del usuario, el 52,6% son hombres y el resto mujeres. 

Por edades, el mayor porcentaje, 42,56%, tienen entre 15 y 29 años. Le sigue, con el 32,74%, los que tienen entre 30 y 40 años. Como curiosidad, hay un 1,66% que tiene entre 75 y 89 años. 

Las áreas de la ciudad con más uso de este servicio se localizan en la Llana de Afuera (1.697), la Plaza Mayor (1.458), Juan Bravo (1.242), paseo de Atapuerca (1.226) y Gamonal-Antigua (1.146). El servicio se presta en 35 edificios públicos y en una treintena de zonas repartidas por diferentes puntos de la capital burgalesa.

Precisamente, el elevado número de usuarios de teléfonos inteligentes ha llevado al Ayuntamiento a trabajar en el desarrollo de aplicaciones móviles para dar un servicio inmediato al ciudadano esté donde esté. La apuesta es tan decidida que se ha comprado un dominio propio en el que alojarlas. Ya se diseña una para los autobuses urbanos con el objetivo de que informe dónde está la parada más próxima y el tiempo de espera o en otra para poder pagar la ORA. «La primera prioridad que tiene el área de Nuevas Tecnologías es que lo que hay funcione y luego impulsar nuevos desarrollos en función de la disponibilidad presupuestaria», manifestó Antón.

 

mejora de la web. La página web municipal (www.aytoburgos.es) es un ejemplo. Hace meses cambió su imagen y mejoró su accesibilidad para los usuarios. Durante el año pasado ha recibido 1.402.403 visitas, un 0,8% más que en 2012, que han consultado 4.806.281 páginas. Se da la circunstancia de que un 45,2% de usuarios fueron nuevos. El 75,96% de las consultas se hicieron a través del ordenador, el 19,53% desde el teléfono móvil y el 4,5% desde una tableta.

La duración media de las visitas fue de 3,38 minutos y un 95,33% procedían de España. Le siguieron las de México (0,46%), Colombia (0,35%), Argentina (0,35%), Francia (0,33%), Perú (0,31%), Estados Unidos (0,31%) o Gran Bretaña (0,29%).

La mayoría de las consultas fueron sobre cuestiones referidas al Ayuntamiento (16,82%), seguidas de las relacionadas con las líneas de autobús (8,39%), deportes (1,50%) o el perfil del contratante (1,23%). Además, el 1,21% de las personas realizaron trámites administrativos. Es precisamente este punto el que se quiere potenciar en lo que queda de legislatura hasta llegar al registro electrónico. Por el momento se pueden tramitar reservas para las actividades de los centros cívicos y del Servicio de Deportes y se trabaja para que puedan presentarse reclamaciones de la OMIC y reservar las actividades educativas de La ciudad abre sus puertas’.

En la actualidad es posible consultar el padrón y obtener certificados, acceder a los recibos de los impuestos, obtener justificantes de pagos o domiciliación de recibos, así como el abono telemático de los mismos.

El concejal de Nuevas Tecnologías está conociendo modelos de sede electrónica en funcionamiento en otras ciudades, pero reconoce que no es una tarea fácil porque hay muchas secciones implicadas. «No se trata solo de instalar este procedimiento; hay que ver quién recepciona los correos electrónicos que lleguen y cómo se les da trámite. Tiene que haber todo un procedimiento y los funcionarios deben adaptarse. Si implantamos el registro electrónico, hay que ver qué se hace. ¿Se imprime la petición y se manda a la sección correspondiente o va todo vía electrónica?», señaló Antón, que a su vez remarcó la necesidad de implantar también el expediente electrónico.