La Guardia Civil ha sorprendido en un coto de la comarca del Arlanza a un furtivo de 56 años cuando cazaba un jabalí sin las autorizaciones necesarias ni la documentación obligatoria, tanto la particular como la del arma que portaba.

Una patrulla recibió el aviso hace unos días, antes de las 20 horas, y se trasladó al paraje, donde el alertante había escuchado dos detonaciones en corto espacio de tiempo y visto circular un vehículo todoterreno por un camino rural.

Los agentes comprobaron a simple vista que en el espacio correspondiente al copiloto, apoyado en el suelo, se encontraba desenfundado un rifle de caza provisto de visor, verificando que se encontraba municionado con un cartucho en la recámara portando otros dos más dentro del cargador.

Sorprenden a un furtivo con un jabalí muerto en el Arlanza

Requerido el propietario del arma, que resultó ser también el del vehículo, para que mostrara la documentación reglamentaria, tanto la personal de caza como la del rifle, explicó que no la llevaba con él.

Un mero registro al interior del maletero descubrió un jabalí (sus scrofa) muerto, que presentaba un orificio en el tórax compatible con un disparo de arma de fuego. No pudo acreditar la procedencia del animal y tampoco su legal abatimiento por carecer de los permisos necesarios.

Se han detectado varias infracciones durante el ejercicio de la caza como no portar la autorización del terreno cinegético, la licencia de armas ni guía de pertenencia de la misma, el seguro de responsabilidad civil y tampoco la licencia de caza; también el hecho de transportar el arma lista para su uso (desenfundada, dentro del habitáculo y con cartucho en la recámara).

Conforme a la Ley de Caza de nuestra comunidad autónoma se han confeccionado varias denuncias administrativas, dirigidas todas ellas al Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León en Burgos.

Adicionalmente ha sido intervenido el rifle utilizado, del calibre 30.06 S.