La magia del Carnaval sirve a los mayores para dejar de ser quienes son por unas horas, apartando los problemas diarios, y a los niños para hacer sus sueños realidad y convertirse en sus personajes favoritos. Por eso, en la jornada dedicada a ellos en estas festividades paganas en la capital ribereña se puede calibrar qué película o serie está de moda entre la chavalería. Si hace unos años había Bob Esponjas por todas partes, hoy por hoy le han ganado la partida los personajes de Frozen, sobre todo entre las chicas, y los superhéroes, para el bando masculino. Una tendencia que se pudo comprobar ayer en las calles aledañas a la Plaza Mayor arandina, donde una amalgama de carnavaleros infantiles acompañaron a dos duendes, una ninfa, un hada, un saltamontes y un gran árbol a buscar su bosque en un pasacalles que sirvió para entrar en calor en una gélida aunque soleada mañana.

De regreso al punto de partida, todos y cada uno de los ataviados con sus disfraces, 118 en la categoría infantil y 18 en la de grupos de 2 o más componentes, desfilaron para lucir sus atuendos y obtener la puntuación del jurado, cuyo veredicto se dará a conocer mañana martes a las 20 horas en la plaza de La Sal. Una labor complicada la del jurado ya que tendrá que elegir los mejores entre una gran cantidad de diseños originales, algunos hechos a mano y otros comprados que compensan la fabricación en serie con las caras de ilusión que lucían sus portadores. Eso sí, los chavales demostraron que da igual tener unos pocos meses o rozar ya los 12 años, todos supieron interpretar su papel y pasar una mañana diferente.

Ya por la tarde, los niños siguieron siendo los protagonistas del Carnaval arandino con la actuación de Kamaru Teatro, con su Misión Espacial, y una gran chocolatada para entrar en calor.