Un grupo madrileño se une a la puja por construir un nuevo Mercado Norte

Á.M / Burgos
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El estudio BSA, que lo diseñó para Baika, realizará una oferta con otro promotor

Una de las prioridades será la urbanización de toda la zona de Hortelanos (traseras de San Juan). - Foto: Jesús J. Matías

El potencial de un Mercado Norte moderno dotado de multitud de espacios comerciales, de un párking subterráneo y cuyo corazón siga siendo el pequeño comercio apoyado en una variante hostelera (gastromercado) parece indudable a la vista de los acontecimientos. A la oferta presentada por el grupo vasco Baika, que propuso invertir 18 millones en levantar un nuevo complejo, se une ahora la de otro «importante grupo inversor madrileño».

Hasta la fecha, Baika había defendido el proyecto redactado por al estudio burgalés BSA, pero «diferencias de criterio y de planteamiento de la inversión», según fuentes municipales, han propiciado que ambas partes hayan decidido continuar el camino, pero por separado. Así, BSA mantendrá los planos que ya conocen los comerciantes y que fueron igualmente presentados a los diferentes grupos con representación municipal, mientras que Baika buscará un nuevo plan de actuación, tal y como también se ha hecho saber a los concesionarios.

En el caso de BSA, el estudio ha trasladado a los responsables municipales que «tratará de incorporar al proyecto de forma activa a las asociaciones de comerciantes» y que «una conocida firma de entidad nacional actuará como consultor especializado en la captación de operadores comerciales». Baika, por su parte, tendrá que apuntalar su oferta con la redacción de un nuevo modelo, al menos arquitectónico.

Mejor así

Lo que sí es seguro en ambos casos es que la inversión se aproximará a los 18 millones de euros y que, de cuajar alguna de las opciones, a las que nada impide que se vayan sumando otras en las próximas semanas puesto que el proyecto deberá sacarse a concurso público, la actuación no supondrá solo un importante movimiento de capital, sino la regeneración completa tanto del complejo como de su entorno más inmediato.

Así que el nuevo escenario, lejos de suponer un problema, ha sido bienvenido en el seno del equipo de Gobierno, donde consideran que «pone de manifiesto el interés» en el proyecto e implica una «confianza que siempre es deseable». De hecho no es la primera vez que se da una circunstancia así. Hace años coincidieron dos ofertas con un propósito parecido: una la hizo una empresa segoviana y la otra la FEC con el apoyo de Mercasa. No cuajaron, pero no es menos cierto que entonces el escenario era diferente, fundamentalmente porque a los comerciantes les quedaba más de una década de concesión y ahora el horizonte, si el Ayuntamiento no renovara las licencias, es inferior a siete años.

A un provisional

La postura municipal ha sido siempre la de respetar las decisiones que tomen los comerciantes por mayoría, pero si quisiera imponer la decisión podría hacerlo indemnizando a los afectados por el número de años que resten de concesión. No es ese el escenario deseado, y de ahí que la comunicación a tres bandas (Ayuntamiento, promotores y concesionarios) estén siendo periódicas en las últimas semanas.

Lo que sí está decidido es que, si llegan a ejecutarse las obras, la ubicación provisional del mercado estará en la Plaza de España. También será necesario dotarlo de párking subterráneo (que puede extenderse bajo la plaza de Hortelanos y ser utilizado para financiar la operación además de para asistir a los clientes) y urbanizar la superficie perimetral.

Una de las cuentas pendientes de los sucesivos planes de regeneración del centro es, precisamente, dar una solución a la zona, que probablemente sea la más degradada de todo el distrito.