La economía municipal ahora es sostenible

A. Pérez / Villariezo
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El alcalde del pueblo de los récords continúa con el problema del agua en la cabeza, pero sigue con ánimo para emprender nuevos proyectos

El alcalde, Francisco Javier Saiz. - Foto: Patricia

Hoy Villariezo está de fiesta y hasta el domingo así seguirá. Sus fiestas mantienen esas actividades que han funcionado otros años como los parques infantiles, las rutas por los alrededores del municipio para que la gente conozca el entorno o la acampada nocturna, que el concejal de festejos, Miguel Ángel González, califica como «un rotundo éxito, es una noche de convivencia, de compartir la cena y risas». También cuentan estos festejos con una curiosa concentración de correpasillos y de mobilettes, para Miguel Ángel esta es «la más bonita y graciosa».

Pero también incluyen novedades como una exposición de fotografías antiguas tomadas por gente del pueblo en el pasado.

En verano la población llega a los 1.500 habitantes, cuando la población habitual ronda los 700, sobre todo se trata de familiares que viven fuera pero tanto la gente que vive aquí todo el año como los visitantes «colabora mucho y participan en todas las actividades», resaltan tanto el concejal como el alcalde, Francisco Javier Saiz.

Además, cuentan con la Asociación de Jubilados y el Club de bolos y con las Amas de Casa, cuya colaboración es «esencial en la realización de la paella», confiesa el alcalde.

Para Francisco Javier las actividades programadas de lunes a viernes «son las que más me gustan porque son las más encaminadas a la gente del pueblo». Aunque tanto alcalde como concejal califican estos días como «una locura» lo hacen con una sonrisa, «son días ajetreados pero se lleva bien cuando ves que la gente disfruta».

Economía saneada. Respecto a la situación del Ayuntamiento, el alcalde opina que «económicamente el Ayuntamiento de Villariezo es sostenible y funciona, lo que ocurre es que dada la situación de crisis estamos muy encorsetados con la regla de gastos». La situación del consistorio se va solventando día a día pero «debemos tener un remanente porque siempre pueden surgir complicaciones», aclara el concejal. Además, como afirma orgulloso Francisco Javier, «somos de los pocos Ayuntamientos que pagamos a los proveedores en 15 o 20 días».

El tema del agua sigue siendo un proyecto pendiente, «seguimos con negociaciones con el Ayuntamiento de Burgos y estamos esperando un convenio para traer el agua de los depósitos de Cortes hasta aquí. Ahora mismo el agua que sube al polígono desde el pueblo tiene que superar un desnivel de más de 200 metros de altura. Creo que junto a Saldaña somos los únicos pueblos colindantes con Burgos que no tienen convenio de agua».

Respecto al proyecto de la depuradora, Villariezo estaba inscrito a la que iba a realizar Arcos pero «los técnicos de la Junta dijeron que por la distancia no era viable sino que había que realizar una propia». Ahora mismo se encuentran de espera.

«La mayoría de proyectos que queríamos realizar se han acometido. Por el momento, el edificio de usos múltiples acabará de acomodarse este año». En un principio, «si no se complican las cosas nos presentaremos a las próximas elecciones aunque primero hay que hablar con todo el equipo que hemos formado», reflexiona el alcalde.