Rosell, el fin de una era

Carlos Cuesta (SPC)
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Los ocho años de gestión del presidente de la patronal han fortalecido la imagen de la CEOE, se han saneado las cuentas con más firmas asociadas y se ha trabajado con mayor transparencia

Decir adiós a una responsabilidad de dos mandatos al frente de la patronal española en la que se han dirimido asuntos de vital importancia para el mundo empresarial dejando una situación de plena normalidad dice mucho de un líder como Juan Rosell Lastortras (Barcelona 1957), presidente de la CEOE desde diciembre de 2010.

La gestión de este ingeniero industrial que, sin tener una compañía en propiedad, ha conducido a la gran patronal en los años más difíciles de la crisis ha demostrado una gran profesionalidad. Se trata de un ejecutivo que, en su trayectoria, ha ocupado cargos de gran renombre como el de presidente de Fomento del Trabajo Nacional (1995-2011), o los de consejero en Siemens España, Inmobiliaria Colonial, Aguas de Barcelona, Endesa y Portaventura, entre otras. Además, desde 2007, forma parte del consejo de administración de Criteria Caixa Corp.

La elección de Rosell a la Presidencia de la CEOE, en sustitución de Gerardo Díaz Ferrán actualmente en prisión por apropiación indebida, fue un gran golpe de poder. Logró 444 de los 710 votos, y el primer objetivo que se propuso fue restaurar el prestigio de la Confederación tras una anterior gestión con más sombras que luces.