Los festivaleros ya están contando los días que quedan para que comience Ebroclub y dar el pistoletazo de salida a una nueva temporada de viajes y conciertos. No tendrán que esperar mucho. Exactamente falta un mes para que la ciudad viva un fin de semana cargado de esencias de los años 60. Esos sonidos, vinilos, motos y vestimentas sesenteras estarán muy presentes los días 12 y 13 de abril  en un festival que cumple su tercera edición y que aspira a mantener la asistencia del año pasado, cuando alrededor de 1.500 personas llegadas de diferentes puntos del país participaron en las diferentes actividades. 

Seis son las bandas que actuarán este año y que prometen dos grandes noches de música en la Fábrica de Tornillos. La del viernes 12 la abrirá el holandés Jacco Gardner, que en pleno siglo XXI está tratando de revitalizar las mejores esencias del pop más barroco y psicodélico. Su directo, aseguran desde la organización, es «sorprendente y único», casi tanto como el concierto que prometen Los Imposibles, banda madrileña formada a finales de 1980 con claras influencias de música soul, garage y psycodelia. La primera noche la cerrará Brand New Sinclairs, grupo formado en Baracaldo cuya música sigue recordando a la que se escuchaba en los años 70.

The New Street Adventure será la encargada de calentar el ambiente en la noche del sábado 14. La banda londinense, con claras influencias del soul de los años 60 y 70, pisará por primera vez nuestro país, en un intento por seguir aumentando su larga lista de seguidores. Su reputación en la escena soul internacional es «excelente», advierten desde la organización. Tras ellos actuarán The Allnighters, banda vitoriana que en sus diez años de carrera (entre 1988 y 1998) se convirtió en «uno de las mejores grupos de rhythm and blues y soul de nuestro país». Ahora, han vuelto a juntarse de nuevo para ofrecer unos pocos y seleccionados conciertos, y estarán en Ebroclub para deleite de sus fans. Por último, el festival mirandés también contará con la presencia de Max Gamuza, grupo asturiano con melodías propias y muy pegadizas propias de los años 60 y 80.

 Las dos sesiones de conciertos comenzarán a las 21.30 horas. Los abonos para los dos días ya están a la venta a un precio especial de 25 euros hasta el 31 de marzo. Pueden adquirirse en los bares mirandeses Bocca, Citi, Sandra, Suizo, Tangente y Tertulia, así como en internet, a través de la página web de Ticketea.  

Tras los conciertos, los dos días se desarrollarán sesiones de música electrónica dirigidas por pinchadiscos procedentes de Miranda, Vitoria, León, Madrid y Barcelona. 

Al margen de los conciertos nocturnos, el festival Ebroclub se vive también de día. El mundo de los años sesenta estará presente a través de la ruta en moto que se celebrará el sábado por la mañana diseñada para los amantes de las Vespas y Lambrettas. Se ha diseñado un recorrido de 50 kilómetros del que disfrutarán tanto los participantes como el público mirandés, que asistirá a un todo un «espectáculo retro y visual» con auténticas joyas de coleccionismo. 

La gastronomía también tendrá su hueco en Ebroclub, con una ruta de pinchos gratuita para aquellas personas que tengan su abono para los conciertos.  Además, en la tarde del sábado se desarrollará en varios locales de la plaza de España la ‘batalla de pinchas a 45rpm’ para que los festivaleros no pierdan el ritmo y sigan bailando hasta el inicio de los conciertos. 

Por último, durante todo el mes de abril el café Tangente acogerá la exposición Mirrors, obra del artista Fernando Gil y que constituye una mirada en el espejo, el arte pop y el minimalismo en la manifestación de un estilo de vida, moda y música muy particular.