El sector exterior continúa tirando de la economía burgalesa, sobre todo de sus grandes empresas o de aquellas que han apostado por aventurarse en el extranjero, y no deja de dar buenas noticias que contrastan con las del consumo interno. Entre de enero y noviembre de 2012, cuando todavía faltaba por cerrarse el último mes del año, ya habían batido el récord histórico anual que había establecido el ejercicio anterior.
En 11 meses las empresas burgalesas vendieron al exterior productos por valor de 2.936 millones de euros cuando el anterior récord era de 2.921 alcanzado durante todo el año 2011. Si comparamos el periodo enero-noviembre, el resultado es un incremento del 9,17% respecto al mismo plazo del año anterior, un porcentaje sensiblemente superior al 3,41% alcanzado a nivel nacional.
Todo esto según la Base de Datos de Comercio Exterior del Consejo Superior de Cámaras, que por el momento sigue ofreciendo como último dato el de noviembre. La Junta de Castilla y León ofreció este jueves un adelanto de los datos anuales incluyendo ya diciembre y en ellos se observa que Burgos superó los 3.151 millones de euros, con un crecimiento interanual del 7,9% frente al 0,5 regional.
Con este nuevo crecimiento, las exportaciones de la provincia de Burgos encadenan el tercer año consecutivo de crecimiento tras el tropiezo de 2009. Si nos remontamos hasta 2006, el dato más antiguo disponible en la estadística de las Cámaras de Comercio, el incremento ha sido del 32%, y siempre teniendo en cuenta que todavía falta por conocerse el dato del mes de diciembre, que mejorará el global.
El buen comportamiento del sector exterior con el que trabajan las firmas burgalesas casi le ha permitido alcanzar a Valladolid, tradicionalmente la más exportadora de Castilla y León. Si en 2011 la provincia vecina exportaba bienes por un valor de 3.846 millones de euros, en 2012 cayó hasta los 3.760. Detrás de este mal comportamiento estaría, probablemente, las dificultades por las que pasa el sector de la automoción y que golpea directamente a la fábrica de Renault y sus empresas auxiliares.
Porque también en Burgos se nota lo complicado del mercado del automóvil. La producción de caucho, el segundo capítulo en importancia de las exportaciones burgalesas tras el cual están Bridgestone y Michelin, ha pasado de 384 millones de euros en 2011 a los 351 de los 11 primeros meses del año pasado.
Sin embargo, en compensación, los productos farmacéuticos (que fundamentalmente fabrica GlaxoSmithKline en Aranda de Duero) se consolidan como el capítulo más importante, con diferencia, al pasar de 938 a 1.038 millones de euros. Acaparan, de hecho, más de una tercera parte del total de las exportaciones.
El podio lo completa el capítulo denominado «reservado», con algo más de 316 millones de euros, que como su propio nombre indica es de origen oficialmente desconocido, pero que tradicionalmente se ha vinculado a la fábrica de explosivos y material militar que Maxam tiene en el páramo de Masa.
OTROS DATOS
Si comparamos importaciones y exportaciones, el tejido empresarial provincial mantiene un saldo positivo, pues en los 11 primeros meses de 2011 se importaron bienes por valor de 2.599 millones de euros.
Precisamente el valor es la comparación que más habitualmente se maneja a la hora de analizar la evolución de las exportaciones porque es el que da idea de los beneficios que suponen para las empresas locales. Curiosamente, si analizamos otros factores como el peso o el número de operaciones aparecen cifras negativas de -13,70 y -7,82 por ciento respectivamente respecto al año anterior. Pero lo que cuenta no es si exportamos hierro o plumas, o en cuantas remesas sale. Lo importante es el importe de esa venta de cara al exterior porque eso es lo que genera riqueza.