El general Yagüe en la diana

R. Pérez Barredo / Burgos
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La programación en el monasterio de San Juan de la exposición 'Un hombre y el resurgir de Burgos.Yagüe' ha desatado la controversia. Mientras se estudia su legalidad, hablan los historiadores

Retrato al óleo de Juan Yagüe Blanco. - Foto: Fundación Yagüe

Luis Eugenio Togores, Historiador

«Hay que normalizar la historia»

No es una exposición necesaria, pero es que el 90 por ciento de las exposiciones culturales no lo son. Se puede hacer, no está ni mal, ni bien. El que no quiera, que no vaya a verla. Habrá a quien le interese y a quien no. El Ayuntamiento lo que tendrá que evaluar, una vez acabe, es la afluencia de personas. Si interesa o no. Lo que debe marcar que esas cosas se hagan es el mercado, no la ideología. La exposición se plantea no como ensalzamiento de la figura de Yagüe, sino de su relación con Burgos, que fue una relación urbanística. Ha de estar presente porque era el capitán general en aquella época, claro. Y es precipitado hacer valoraciones sin conocerse aún bien el contenido de la muestra. Me parece que nos estamos poniendo la tirita antes de la herida. Los españoles tenemos que empezar a normalizar la historia.

Pablo Méndez, Historiador

«Debatir sobre la legalidad de ceder un espacio público revela que queda mucho por hacer»

Nada se descubre si afirmamos que en torno a la figura de Yagüe gravitan dos imágenes superpuestas: la del militar implacable que escribe en rojo alguno de los episodios más terribles de la Guerra Civil, y la del falangista enemigo del materialismo y preocupado por la situación del obrero. Es en este último perfil donde se forja la imagen que ha trascendido de Yagüe en nuestra ciudad, como impulsor de una larga lista de obras civiles, militares y hasta religiosas. Entiendo que el título elegido para la exposición, ‘Un hombre y el resurgir de Burgos. Yagüe’, ahonda en la vieja línea de asociar la imagen del militar soriano como benefactor de la ciudad, y muestra que la manipulación del pasado sigue latente. Los sublevados hundieron a este país en una agonía colectiva a la que denominamos posguerra, y es precisamente en esos años en los que desarrolla Yagüe las acciones que ahora se pretenden ensalzar. No hay resurgimiento; lo que existe es una mano de hierro en guante de seda. Que se haya abierto un debate sobre, no ya la conveniencia, sino la legalidad de utilizar espacios públicos para homenajes de este cariz demuestra que aún queda mucho camino por recorrer, pues sobre lo evidente no deberían generarse dudas. No creo que nadie afecto a la figura de Yagüe pueda tener quejas de cómo la ciudad ha tratado los emblemas y las referencias públicas que se han mantenido y se mantienen aún, sin crear conflicto alguno. Ahora bien, pretender abundar en el elogio en un espacio público me parece inoportuno. Que los homenajes domésticos en domésticos se queden. Hay personajes recientes en nuestra Historia que están demasiado alejados de nuestra realidad (a la que combatieron, por cierto), como para que se les tributen homenajes en el espacio que es de todos.

Fernando García de Cortázar, Historiador

«No se puede homenajear a alguien vinculado a la matanza de Badajoz»

A mí me gustaría que no se celebrase la exposición por lo que tiene de homenaje a un militar cuyo nombre está vinculado a uno de los episodios más crueles de la guerra civil, la terrible represión y carnicería de Badajoz. Creo que la derecha -de la ultraderecha no espero nada-  debe tomarse en serio la condena de tales actos de barbarie y estar vigilante para que la izquierda no nos cuele su santoral, en el que figuran también autores y responsables de terribles masacres. Eso fue la guerra civil: la violencia desatada en los dos bandos. La tragedia de España es que todavía pervive una subcultura de guerra civil y dictadura que hace difícil el recuerdo ponderado de lo que fueron aquellos años dramáticos. Y que una izquierda infantil y revanchista no está por la labor de reconocer la gravedad de muchas de sus acciones criminales durante la guerra civil. Sabemos que el escritor George Orwell abandonó España al descubrir que tras aquella visión romántica de la resistencia antifascista de la República aparecía el terror de las checas y la sombría mano de Stalin.

Ignacio Fernández de Mata, Antropólogo

«Es la peor imagen para la marca Burgos»

Unas líneas no son un libro, ni ciertos episodios selectos configuran una vida. Quien pretenda definir al falangista-general Yagüe teniendo solo en cuenta sus amables años de jerarca burgalés, o su experiencia familiar, yerra, confunde y (se) engaña. ¿Cómo puede el Ayuntamiento, sobrevalorando  confusas visiones localistas, ponerse por encima del dolor de las víctimas y del obligado respeto a la Ley 52/2007? ¿Por qué esa obsesión por mostrarse ignaros de la Historia? Uno de los graves problemas señalados por el jurado de la malograda Capitalidad Cultural Europea 2016 fue el profundo peso franquista de Burgos sobre el que no había realizado, tantos años después, un oportuno distanciamiento validando con ello su compromiso democrático. Demasiada gente, parecían pensar los miembros del jurado europeo, aún evoca con delectación e ignorancia el título de capital de la cruzada o el infantil recuerdo del aparato metalífero de la guardia mora. La exposición sobre el general Juan Yagüe es, posiblemente, una de las peores actividades que podamos concebir en estos momentos para la imagen (marca, le dicen los técnicos) de la ciudad. Todo lo cual, siendo importante, resulta menor frente a la ofensa e insensibilidad con las víctimas de una cruel represión en la que jugó un papel tan protagónico como sanguinario. No me imagino al grupo Volkswagen haciendo homenajes hoy a Adolf Hitler, a pesar de haber sido éste su impulsor y co-diseñador del primer escarabajo. Son tan obvias las razones por las que no debe celebrarse esta exposición en locales municipales que resulta ofensiva la ignorante duda de algunos. Un ayuntamiento al que se le llena la boca diciendo que quemar contenedores es una violencia  imperdonable e injustificable, no puede homenajear a un golpista que asesinó a miles de personas.

Luis Castro, Historiador

«Va contra la Ley y carece del contraste crítico necesario»

Va contra la Ley de Memoria Histórica cuando establece que no se pueden ensalzar personas, actos o acontecimientos contrarios a los valores democráticos imperantes (artículos 15 y 16 de la ley); no se puede argumentar que esa figura esté carente de atención memorial en Burgos, por razones obvias. Hasta hace poco, un colegio, un hospital, una barriada etc., en Burgos llevaban su nombre. San Leonardo (Soria) aún es de Yagüe y hay multitud de ciudades con calles a su nombre, entre ellas Oviedo, donde su represión fue durísima. Por contra, no hay referencias a sus víctimas en la mayoría de sitios donde actuó.Desde un punto de vista académico, me imagino que la exposición carecería del contraste crítico necesario, dado que la organiza una fundación volcada en promocionar la imagen del general. A pesar de que hay 3 biografías de Yagüe (Calleja, Ramón Garriga, Togores) no hay una biografía que no sea laudatoria y encomiástica de Yagüe. Está por evaluar lo que significó la gestión de Yagüe durante su capitanía, más allá de esas versiones, que son las que tenía el franquismo. Se corre el riesgo de dar una imagen de Burgos hoy que ya no responde casi nada a lo que era hace 70 años.

Ian Gibson, Historiador

«Su nombre no debería ser recordado en ningún lugar público de la España Actual»

El general Juan Yagüe fue el directo responsable de la ejecución de miles de defensores de la República en Badajoz. Nunca lo negó. Su  nombre no debería de ser recordado en ningún lugar público de la España actual, por ética, decencia humana y autorrespeto ante el mundo.  Pero sí figura, notablemente, en Oviedo, donde la sede del Premio Príncipe de Asturias, nada menos, se encuentra en una calle que lo lleva, lo cual es absolutamente bochornoso y vergonzoso. En relación con la memoria histórica el Estado español se está comportando de manera cobarde e indigna.  Espero que Burgos no caiga en el error de honrar a tal ser humano.

Paul Preston, Historiador

«Hay que saber primero en qué Consiste»

No puedo comentar nada al respecto ni a favor ni en contra si todavía no se conoce exactamente en qué va a consistir la exposición.