La plantilla de Ambulancias Rodrigo se encuentra a un paso de la convocatoria de paros parciales y/o huelga, después de que la reunión del Serla celebrada ayer terminara sin ningún tipo de acuerdo. Los trabajadores votarán esta tarde en asamblea si deciden dar una última oportunidad y tratan de forzar ujn acuerdo in extremis con la empresa del grupo Ambuibérica o comienzan con medidas de presión.
Hace ya meses que cerca de un 90% de los 80 empleados de la firma de transporte sanitario firmaron en contra de la propuesta de la patronal, que pasa por modificar la actual jornada laboral de 12 horas a 8, con la correspondiente merma salarial, pero con más horas de disponibilidad presencial, unas 40 al mes, según los cálculos de Comisiones Obreras, al transformarse la jornada continua en partida. «Con ello lo que quieren conseguir es con menos trabajadores tener más servicios cubiertos, y sobre todo en los picos de trabajo, que se producen de 12 a 2 y de 5 a 8 de la tarde, cuando se dan las altas hospitalarias», explica Marcos Citores, secretario de la Federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO.
La plantilla se muestra mayoritariamente en contra de partir la jornada y de la pérdida económica, aunque la asamblea tendrá esta tarde la última palabra.
El comité exige que se mantengan os turnos, de mañana, tarde o noche, y que no se realicen más fines de semana de los necesarios. La plantilla estaría dispuesta incluso as realizar alguna jornada de partida de manera puntual, pero no de manera periódica varias veces al mes, porque se trata de una situación que dificulta la conciliación laboral y familiar de los conductores.
Según ha denunciado el comité a lo largo de esta negociación, es en el servicio de programados donde se producen los mayores problemas. El desconocimiento de los turnos de trabajo, desemboca en un estrés mayor a los trabajadores de transporte sanitario». Explicaron que «los turnos de los conductores se realizan a la demanda de las necesidades y esto implica que cada día se tiene un horario diferente. Horario que les comunican al teléfono una vez terminada la jornada anterior». Algo que, denunciaron, afecta a la salud.»Está sobradamente demostrado que una persona que tiene una afectación física de su salud puede sufrir un daño psicológico. Los TES (técnicos en emergencias sanitarias) tienen que lidiar con el estrés emocional, la depresión y otras afectaciones psicológicas en su día a día».
Tras hacerse eco de esta «desorganización», la empresa se ofreció a fijar turnos de trabajo y en septiembre las posturas se acercaron, pero pese a la mediación de la autoridad laboral no ha sido posible aún llegar a un acuerdo.