Sin rastro de Carlos Fernández Vivanco ni de su Renault Laguna verde matrícula 9194 CXV. Así acabó la jornada de ayer tras el despliegue de un intenso dispositivo de búsqueda, en el que participaron, al menos, doscientos voluntarios, así como los efectivos de la Policía Local de Medina de Pomar y la Guardia Civil, y que hoy continuará con la misma tarea a partir de las diez de la mañana. El perro de rescate, que tanto ayer por la tarde como el pasado miércoles salió desde la casa del hostelero siguiendo su rastro, repitió dos veces el mismo camino. Desde la zona residencial de Miñón se dirigió por la carretera hacia Medinabella para entrar por un camino a la derecha y terminar su búsqueda junto al río Nela, donde perdió el rastro. Este lugar se sitúa a unos dos kilómetros de la casa del desaparecido.
Esta pista, una de las pocas con las que se cuenta, hace pensar a las fuerzas de seguridad y al entorno más cercano de Fernández Vivanco que podría haber dirigido sus pasos hacia el río. Este hecho motivó que a primera hora de la mañana, un perro de la Unidad Canina de Rescate y Salvamento Ucas de Arrate, con base en Miranda de Ebro y Eibar, saliera de Medinabella por la orilla del Nela para llegar tres horas después al barrio de El Vado. Ni rastro. Por la tarde, repitió el recorrido por la otra orilla.
Asimismo, numerosos voluntarios fueron dirigidos tanto hacia los cauces del Trueba como del Nela en el entorno de Medina. La respuesta ciudadana al dispositivo de búsqueda que partió a las diez de la mañana de la sede de la Policía Local y de nuevo, a las tres y media de la tarde, fue ejemplar. Cerca de doscientas personas respondieron al llamamiento lanzado desde el Ayuntamiento medinés y peinaron la ciudad y buena parte de la comarca, haciendo hincapié en las zonas más altas desde las que se podría divisar mejor el vehículo de este hombre de 43 años, que dejó su casa vestido con una cazadora naranja y un pijama de cuadros grises pequeños.
Entre los voluntarios que salieron de Medina se encontraba parte de su familia, así como el alcalde, José Antonio López Marañón, y efectivos del equipo de bomberos voluntarios de la Diputación. En la búsqueda se movilizaron decenas de vehículos, entre ellos todos los municipales. Fuera de Medina también hubo apoyos, como el que prestaron un grupo de vecinos de Soncillo, la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil de Villarcayo o la Asamblea Local de Cruz Roja Villarcayo, que rastrearon zonas, como Montija, los valles pasiegos de Espinosa o Vega de Pas.
Al mismo tiempo, desde la Comandancia de la Guardia Civil de Medina se movilizó a todos los efectivos en esta búsqueda y se activó un helicóptero del cuerpo, que sobrevoló la comarca durante la mañana. La Guardia Civil explicó que ha dado aviso a las comandancias de las provincias limítrofes, dado que el hostelero llevaba el depósito de su coche lleno cuando dejó su casa indocumentado, sin dinero y sin su teléfono móvil. La Guardia Civil no descarta movilizar otros medios, como los expertos en el medio acuático o a su unidad canina, en función del avance de la investigación y el hallazgo de pistas que acerquen al paradero de Carlos, conocido por todos por su trabajo detrás de la barra del Bar Fervi durante más de una década.