Herrera inicia su quinto mandato con «vértigo» por el adiós a su Gobierno

Santiago González
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Toma de posesión. La abstención de Ciudadanos convirtió al candidato del PPen presidente, quien jurará el cargo el lunes y ultimará la reforma de su Ejecutivo

El guión se desarrolló según lo previsto y el candidato popular, Juan Vicente Herrera, fue elegido como presidente de la Junta de Castilla yLeón por mayoría simple en la segunda votación, gracias a la abstención de los cinco procuradores de Ciudadanos. Herrera tomará posesión el próximo lunes y, de esta forma, iniciará su quinto mandato como una etapa «hermosa y complicada», por la «responsabilidad» que recibe de la cámara autonómica, según reconoció en los pasillos a los periodistas nada más terminar el pleno.
Tras el debate del programa presentado por el candidato, las Cortes vivieron ayer únicamente las dos votaciones. En ambas se produjo idéntico resultado y Herrera consiguió el respaldo de los 42 procuradores del PP, la abstención de los cinco de Ciudadanos, y el voto en contra de los 25 de PSOE, los 10 de Podemos y los dos del Grupo Mixto -IU y UPL-. La elección del candidato en segunda vuelta es algo inédito en los últimos 24 años en el Parlamento autonómico, ya que el Partido Popular ha contado con mayoría absoluta desde 1991.
El presidente electo, tras recibir el aplauso y la felicitación de muchos de los parlamentarios de todos los grupos políticos, avanzó que tomará posesión el lunes en un acto que ha pedido que sea «austero y madrugador» con el objetivo de «no paralizar a todas las instituciones», además de que ha reconocido que él mismo se tiene que poner a trabajar para elaborar un gobierno que el mismo martes «se tendrá que poner a trabajar, porque hay problemas que no pueden esperar porque no entienden ni de debates ni de pausas».
Antes de eso, la presidenta de las Cortes, Silvia Clemente, comunicará comunicará la elección de Juan Vicente Herrera al Rey Felipe VI y al Gobierno de España, además de su publicación en los boletines oficiales de España y Castilla y León.
El presidente electo de la Junta se negó a dar «pistas» sobre la estructura o los nombres de su nuevo Gobierno, aunque aseguró que intentará rodearse de un «buen equipo». No obstante, Herrera reconoció que le produce «pena y vértigo» despedirse de los actuales consejeros, a los que consideró como el gabinete «más rodado» de sus 14 años al frente de la Junta, ya que en esta última legislatura tan complicada han mantenido «ordenada» la Comunidad.
 
Próximas horas. El dirigente popular manifestó que, tras su investidura, se inician unas horas «de mucho interés» e insistió en que no hablará de posibilidades, sino que hasta el martes no comunicará «hechos ciertos y cerrados». «Intentaré rodearme de un buen equipo», afirmó Herrera, quien reconoció la «responsabilidad de decidir sobre personas», al recordar que algunos de los actuales consejeros han asumido otros compromisos o han decidido dar un paso atrás en la política.
De esta forma, el presidente electo no podrá contar ya con Silvia Clemente, hasta hace pocas fechas consejera de Agricultura y Ganadería y actual presidenta de las Cortes;Antonio Silván, que es alcalde de León tras dejar la consejería de Fomento y Medio Ambiente; o Tomás Villanueva y Juan José Mateos, consejeros de Economía y Educación, que han decidido abandonar la primera línea de la política.
 
Ganas de aprender. Tras calificar de «intenso y largo» el debate de investidura que acababa de concluir, aseguró que lo había preparado «a conciencia y con honestidad» e incluso que ha aprendido «algunas cosas».
A lo largo del debate «he sido plenamente consciente de que bastantes cosas han cambiado y seguramente para bien, y, por lo tanto, a pesar de que me ven ustedes mayor, estoy en disposición de seguir aprendiendo. Hay que aprender y de este debate he aprendido mucho», reconoció Herrera, desde la «serenidad», tras ser investido por quinta vez como presidente de la Junta.
Finalmente, el burgalés Juan Vicente Herrera sostuvo que este fin de semana dedicará algunas horas al paseo, a la meditación, a la compra de libros y a tomarse «algún vinito en las tabernas burgalesas» mientras da vueltas a su nuevo Gobierno.