La investigación sobre el cadáver del gijonés que apareció descuartizado en Las Landas (Francia) el pasado mes de julio ha llevado a la Policía Nacional hasta la provincia de Burgos y, más en concreto, hasta Villadiego. Ayer por la mañana agentes de la Comisaría Central llegados de Madrid detuvieron a un hombre de nacionalidad colombiana y a su novia, dominicana, en su casa situada en la Plaza Mártires de la Tradición, al lado de la Pescadería Maxi. En principio los investigadores los relacionan presuntamente con la desaparición de Fernando B.G., que había muerto tras estallarle en el estómago una cápsula de cocaína que había ingerido para pasar la droga a Suiza.

Por estos hechos ya fue arrestado en agosto en el país helvético un ciudadano dominicano cuando trataba de introducir en ese estado un kilo de cocaína. Más tarde le vincularon a lo que le ocurrió al ‘mulero’ asturiano, tal como publicó El Comercio. Además, la droga decomisada a ese primer detenido fue la misma que mató a Fernando B.G., según los análisis de la Policía Científica, algo que llevó a pensar que fue él quien lo descuartizó, una vez fallecido, para recuperar la sustancia estupefaciente que escondía en su organismo.

Sin embargo, las pesquisas policiales, dirigidas por la Audiencia Nacional, no terminaron ahí. Aunque la maleta con el cuerpo apareció en una zona boscosa de Las Landas (Francia) había que determinar dónde murió y en qué lugar fue descuartizado el cadáver. Además, la Policía sospechaba que tanto la víctima como el súbdito dominicano no actuaban solos. Las pesquisas llevaron a los investigadores hasta Villadiego y, en concreto, hasta A.M.S., el colombiano arrestado ayer junto a su pareja.

El registro y los arrestos se produjeron en esta casa de la Plaza Mártires de la Tradición. - Foto: Patricia Pero no era la primera vez que los funcionarios policiales visitaban la localidad. Meses y semanas antes de detenerlo estuvieron en el pueblo preguntando por él a amigos y conocidos. Entre los lugares a los que acudieron figura la fábrica de pastas que hay en el polígono industrial, donde A.M.S. trabajaba hasta hace 15 días. De hecho fue despedido ante las sospechas de que estuviera relacionado con algún asunto turbio. Él se excusó ante sus jefes diciendo que la Policía le incriminaba «porque iba mucho con el tío de su novia (dominicana) y habían encontrado unas huellas suyas».

A pesar de saber que la Policía le vinculaba a estos hechos, no ha huido de la localidad, algo que extrañaba a algunos vecinos, quienes señalan que era «un chaval tranquilo». De su novia aseguran que era muy maja y siempre «andaban muy acaramelados».

Aparte de detenerlos a los dos, los agentes practicaron un registro de la casa de alquiler en la que residían. El dueño de la vivienda ni se enteró. «Me lo contaron los vecinos;me dijeron, pero si está la Guardia Civil y la Policía ahí en tu casa; y después ya me comentaron que se los habían llevado a los dos», explicaba a este periódico. Al parecer, la madre de ella se encontraba presente, pues había acudido a pasar unos días con ellos.

Este ciudadano colombiano recaló en Villadiego hace poco más de dos años. No siempre vivió en esa casa de la Plaza Mártires de la Tradición. De hecho la alquiló hace 4 meses para quedarse 2, «pero al final fue alargando su estancia», explica su casero. Antes había ocupado una vivienda cerca del Arco de la Cárcel.

Su primer empleo en la localidad no fue en la fábrica de pastas, antes estuvo trabajando en el bar Peruco, situado en la Plaza Mayor. El sobrino del dueño, además, lo ha contratado en alguna ocasión para establecimientos suyos y asegura que ha ido de copas con él en alguna ocasión «y era un tío muy normal, nada conflictivo». Preguntados algunos vecinos por la posible relación de A.M.S. con el mundo de las drogas, nadie dice saber nada.

En la Carnicería Carretón -situada al lado de la casa de los arrestados-, la Policía estuvo hace un mes y medio para mostrarles fotografías de presuntos sospechosos, por si los habían visto en alguna ocasión con sus vecinos. «Pero no reconocimos a nadie», afirman. Y es que la Comisaría General está tratando de desmantelar todo el grupo criminal que movía la droga de España el resto de Europa.

¿Qué papel jugaba Villadiego? No se sabe aún. Se desconoce si en el registro practicado ayer aparecieron vestigios que probaran que el ‘mulero’ asturiano’ murió y fue descuartizado allí. A los dos detenidos los vinculan con la desaparición de su cadáver.

Al parecer el descuartizamiento lo habrían efectuado varias personas, pero el viaje a Suiza lo habría realizado solo el ciudadano dominicano, que escondió la maleta en un bosque con el fin de que nadie lo hallara. Pero un paseante encontró la valija y, a unos metros de ella, la cabeza de la víctima.