Juan José Asensio, quiere dotar a los vecinos de Báscones de Zamanzas de servicios dignos y, para ello, nada más llegar a la Alcaldía del Valle de Zamanzas se marcó como principal objetivo el asfaltado del único acceso a la localidad desde Gallejones, tres kilómetros de zahorra y piedras que en invierno se transforman en un tormento para los conductores. Desde el pasado junio ha hecho multitud de gestiones en busca de apoyos de los distintos partidos políticos de la Diputación para conseguir una ayuda económica que permita al Ayuntamiento ejecutar esa obra e incluso esta semana se entrevistaba con el presidente de la Diputación, César Rico. Pero ahora se ha encontrado con otro problema y es que, según el Catastro, el acceso a Báscones es una vía agraria propiedad de la Junta de Castilla y León y no es de titularidad municipal como el Consistorio ha venido creyendo durante los últimos veinte años.
En este tiempo, el Ayuntamiento se ha encargado en la medida de sus posibilidades del mantenimiento de esta vía. Zamanzas tiene un presupuesto anual de 93.000 euros y «con sus escasas y ridículas intervenciones ha generado, muchas veces, más deterioro del trazado que una mejora», lamenta Asensio, quien recientemente logró que la maquinaria que la Diputación presta a los ayuntamientos realizara un bacheo y la mejora de las cunetas.
Como ya denunció en DBel pasado mes de agosto, a Báscones ya no llega el servicio de Correos ni el transporte escolar. Tampoco servicios de reparto del pan u otros productos alimenticios se aventuran a llegar hasta una localidad, donde tampoco las calles están asfaltadas y el exceso de hierro en el agua del manantial obliga a un costoso proceso de potabilización antes de que el líquido llegue a los hogares. Ver la televisión, hablar por el móvil o conectarse a internet también son una aventura en Báscones.
En su encuentro con Rico, Asensio le trasmitió su descubrimiento y el presidente provincial le trasmitió que la Diputación no puede subvencionar obras destinadas a una infraestructura que, según el Catastro, no es de titularidad municipal. Rico le remitió a la Junta de Castilla y León. Pero, además de este camino, Asensio pudo comprobar que la que ahora es una carretera de la Diputación, la BU-V-5145, la llamada bajada del Escalerón que va de Gallejones a la N-633, también aparece en el Catastro como una propiedad de la Administración regional y no de la provincial.
Su «empeño» es llegar a «todas las administraciones implicadas» para resolver esta situación que «amenaza la supervivencia de los pueblos». Al mismo tiempo, lamenta que la propia Junta de Castilla y León tenga previsto destinar 70.000 euros de una corta de madera para habilitar una nueva pista forestal que atravesará Báscones por su parte este, cuando podría destinarse este dinero a los 3 kilómetros del actual acceso rodado que tienen los vecinos que aún resisten allí.