El Ayuntamiento de Burgos va a desembolsar 10.160 euros para que 11 empresas pongan a disposición de la ciudad 40 máquinas para luchar contra las nevadas. Las compañías privadas cobrarán por cada vehículo -esparcidor de fundentes, con cuchilla o ambas cosas- 254,4 euros y no los 240 del año pasado, porque para la presente campaña el Consistorio ha aprobado una subida de tarifa del 6%.

Las empresas percibirán esos más de 10.000 euros por mantener su flota en alerta ante la posible activación del plan de nevadas. En caso de tener que movilizar sus vehículos cobrarán 44,5 euros la hora por cada uno si trabajan por el día y 67,8 si lo hacen por la noche. Para los conductores la tarifa es de 56 euros por hora.

El concejal de Seguridad Ciudadana, Salvador de Foronda, subrayó ayer los beneficios que tiene para la ciudad poder contar con máquinas de empresas externas, que permiten que «el plan de nevadas salga muy económico». En este sentido explicó que disponer de una máquina esparcidora con cuchilla durante cuatro meses puede costar en régimen de alquiler en torno a los 110.000 euros. Y destacó que responsables de la lucha contra la nieve del Ayuntamiento de Vitoria «han visitado Burgos con el fin de familiarizarse» con el sistema que utiliza la ciudad, «por lo que supone de ahorro». El Consistorio de la capital de Álava reserva cada año 400.000 euros de su presupuesto para combatir los temporales de nieve. Burgos el pasado año gastó 20.000 euros, fundentes aparte.

A las 40 máquinas de las compañías privadas hay que sumar otras 30 de titularidad municipal. Por otra parte, un total de 230 trabajadores del Ayuntamiento podrán ser movilizados durante esta campaña.

De Foronda explicó ayer que este año «cobrará especial importancia el mantenimiento preventivo de las calles», con especial atención a las grandes arterias de circulación, como son la carretera del Cementerio (avenida Cajacírculo), avenida de Cantabria y el bulevar.