Los trabajadores de la planta incendiada de Campofrío podrán tener mejores oportunidades de recolocación si prospera un acuerdo con la Confederación de Asociaciones Empresariales (FAE) para que esta última ejerza de canalizadora de los cientos de parados que provocará el siniestro ocurrido el domingo.

La empresa cárnica y la patronal burgalesa estudian desde hace varios días la formalización de un convenio mediante el cual se crearía una especie de bolsa de trabajo compuesta por los afectados por el expediente de regulación temporal de empleo y a la cual las empresas de la ciudad podrían recurrir cuando lo necesiten, colocándolos como prioridad en la contratación, por ejemplo en épocas de picos de trabajo.

El propio presidente de Campofrío Food Group, Pedro Ballvé, apunta la posibilidad de este próximo acuerdo «que me han propuesto, que me parece magnífico y que aportaría más capacidad de resolución al problema del empleo», pues se combinaría con los esfuerzos de recolocación que está llevando la propia Campofrío en otras plantas de España, principalmente de Burgos, y a los acuerdos de prejubilación que en paralelo pueda cerrar con la parte de sus empleados que tenga edades próximas a la retirada.

Por su parte Miguel Ángel Benavente, presidente de FAE, confirma la existencia de las conversaciones para el convenio, aunque apunta que todavía deben estudiarse varios detalles para su concreción. Entre otras cosas, la patronal aún no sabe si sería mediante la firma directa entre la Confederación y Campofrío, o si se ejecutaría mediante convenios con cada una de las empresas que libremente quieran adherirse a la iniciativa.<

«Es algo que tenemos que comentar, probablemente la próxima semana, en el seno del Comité de Industria y hacer una tormenta de ideas para cerrarlo», apunta Benavente, quien añade que «las urgencias no son buenas consejeras, tampoco en estos casos» y añade que antes la propia Campofrío tiene que seguir despejando el número final de personas afectadas por el ERTE.

Las que finalmente queden en situación de desempleo serían las que pudieran acogerse a este convenio (o convenios, en plural), pues ya se sabe que la plantilla puede trabajar para otra empresa y volver después al expediente, manteniendo su puesto de trabajo en Campofrío para cuando esté reconstruida la nueva planta.

Prioridades

En relación a la negociación del ERTE con la compañía, el Comité de Empresa destaca que  el objetivo es «intentar hacer un plan social en el que trataremos de priorizar en las ayudas a la gente que no tiene el desempleo completo, a quienes tengan la casuística de tener una familia numerosa y a los empleados más mayores».

Lo que también quieren «dejar claro», por aquello de que pueda haber quien se genere unas expectativas demasiado grandes, es que «un empleado no va a cobrar lo mismo en el paro que si estuviera trabajando». De lo que se trata, y en lo que van a poner todo su empeño, es en que «la merma económica sea la menor posible». Las ayudas las aportará la Junta y la empresa las distribuirá.