El líder del PSOE, Pedro Sánchez, presentó ayer a su partido como la garantía de estabilidad frente al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, al que acusó de generar «inestabilidad» con medidas como la reforma laboral, la amnistía fiscal y los recortes sociales, y por no asumirse responsabilidades en casos de corrupción.
«Soy de los convencidos de que el factor de inestabilidad política en nuestro país se encuentra en la Moncloa y se llama Mariano Rajoy», sostuvo en una conferencia ante empresarios en la XXXI Reunión del Círculo de Economía celebrada en Barcelona, en la que pidió al jefe del Ejecutivo explicar en el Congreso la presunta financiación irregular del PP.
El socialista sostuvo, además, que las últimas elecciones demostraron que la mayoría de los ciudadanos quiere un cambio presidido por la estabilidad y el diálogo, en el que los gobiernos y las instituciones «huyan del cortoplacismo» y sirvan al interés general.
Para este cometido, erigió al PSOE como el que puede liderar los dos principales retos frente a inmovilistas y rupturistas: renovar la política y el sistema democrático y constitucional reformando la Carta Magna, y combatir la corrupción. «La resignación que ofrece el PP no va a resolver la encrucijada en la que se encuentra Cataluña. Y el PSOE está determinado a gobernar ese cambio desde la estabilidad y la coherencia», según él. Y es que, a su juicio, los populares están a las puertas de perder las generales porque están agotados y asediados por la corrupción.
Por su parte, el presidente del Círculo de Economía, Antón Costas, instó a Sánchez a que proporcione estabilidad al país en el nuevo mapa político, aunque sin especificarle qué tipo de apoyos. «Ustedes han perdido votos, pero aunque hayan perdido votos todo hace pensar que van a tener cuotas de poder muy importantes», sostuvo, instándole a que las use para «reducir la incertidumbre en el ámbito de la gobernabilidad».
CITA EN FERRAZ. El Comité Federal del PSOE analizará hoy en Ferraz el resultado de las elecciones y debatirá sobre la política de pactos a seguir, para la que la dirección de Sánchez solo ha marcado un límite: no dialogar ni con PP ni con Bildu.
En este sentido, el secretario de Acción Política socialista, Patxi López, sostuvo que considera posible un acuerdo entre su partido y Podemos para llegar a la Moncloa si los populares son la fuerza más votada. Así, en su opinión, no se trata de una «alianza» entre su grupo y el liderado por Pablo Iglesias, pero sí cree que hay que acostumbrarse a que «se pueden poner de acuerdo, pues tiene vocación de hacer una política diferente,».