De sonrisa fácil y contagiosa; siempre de buen humor y haciendo bromas en la pista, colaborando para mantener el buen ambiente en el San Pablo Inmobiliaria. Edu Martínez es un tirador nato, que en esta fase final aporta además intensidad defensiva. Empezó a jugar al baloncesto en su tierra Logroño con el CB Las Gaunas, después pasó a la cantera del Barcelona -es culé y el pasado sábado pasó un mal fin de semana- ; estuvo cinco campañas en el Estudiantes, jugando la última en ACB. Desde Madrid se centró en LEBOro donde ha vestido las camisetas del Breogán, Ourense y este año, San Pablo Inmobiliaria. Una curiosidad: es el jugador con el pie más pequeño. Con sus 2.02 metros calza un 44.

Alcanzado el play off, ¿qué ambiente se vive en el vestuario?

Muy bueno, pero desde el primer día. A pesar de ser cada uno de un padre y una madre, de diferentes países, lo cierto es que se ha creado una conexión muy buena y eso se nota especialmente en la pista.

¿Es muy diferente el ambiente de las categorías inferiores al de un club profesional?

En ambas hay una gran ilusión pero es distinta. Cuando eres pequeño la ilusión es crecer y sueñas con jugar en el primer equipo. En profesionales la ilusión se siente. Quieres ser mejor jugador para ofrecérselo al espectador; quieres que todo salga bien y quieres disfrutar. Es ilusión, pero muy diferente.

En los últimos partidos está teniendo una mayor aportación defensiva, sin olvidarse de la anotación...

Es cierto, cada día me he ido encontrando mejor. Aquí se hace mucho hincapié en la defensa y desde el primer día se insiste en el trabajo defensivo, eso va calando y vas creciendo... Al final, todo se plasma en la pista.

¿Qué reto se marcó al venir a Burgos, a un club nuevo?

Es cierto que es un club nuevo pero tiene sus cimientos. Todo el mundo sabe que Burgos es un ganador nato, que lucha por el ascenso y donde se hace un buen trabajo. Aunque sea un club diferente, la imagen permanece. Mi reto era ofrecer mi mejor versión y ayudar para ascender.

¿Su mejor partido con San Pablo Inmobiliaria?

Castellón y el último ante Rioja. Me encontré cómodo, con un gran acierto en el tiro. Al empezar el partido metiendo siempre se coge confianza y, entonces, aportas en todo.

Los dos últimos encuentros de la Liga, Oviedo y Cáceres...

Hay que ganar. Oviedo es cuarto y quiere ser tercero. Nosotros debemos pelear por mantener esa tercera plaza. También es importante ganar a Cáceres para entrar con buenas sensaciones en el play off.

¿Qué rival quiere en el play off?

Todos los que están se lo merecen. Ahora mismo y por los antecedentes no quiero ni en pintura a Ourense. El hecho de que vaya a subir no importa; todos siempre queremos ganar.

¿Cómo ve el futuro de San Pablo Inmobiliaria?

Ahora mismo pasa por ganar a Oviedo. Nuestra mirada está centrada en Oviedo. Hay que ir paso a paso.

¿Y el suyo?

Dios dirá y proveerá.

Conoce la ACB como jugador, ¿cree que va a cambiar las normas de entrada?

No;es más que posible que cierren la liga; Dios no lo quiera porque entonces no merecería la pena la lucha en LEB Oro.

Con tanto inmovilismo quienes más sufren son los jugadores...

Lo que es evidente es que hay clubes que construyen equipos pensando en ascensos; jugadores que tienen ganas de ascender. Los de LEB luchan por subir y los de abajo de ACB por mantenerse y eso es lo que hace atractiva la competición. Si la ACB corta los ascensos...

Por último, jugó en Estudiantes, ¿qué opina de su situación actual, penúltimo?

Es muy parecida a la que yo viví en mi última campaña 11-12. Al final se descendió. Se está viviendo la misma rutina; se lucha por todo pero las cosas no salen y no se tiene nada de suerte.