Cuenta atrás para el acuerdo

Agencias
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Juncker confía en que las negociaciones con Atenas se resolverán «en los próximos días o semanas», aunque insiste en que se necesitan «progresos adicionales» para cerrar el pacto

 
 
El Gobierno griego se la jugó esta semana al asegurar que su delegación negociadora y los acreedores ya estaban elaborando el borrador definitivo del acuerdo que permita desbloquear el último tramo del rescate heleno que dé liquidez a las vacías arcas públicas de Atenas. Sin embargo, sus interlocutores negaron en todo momento esa posibilidad y subrayaron que aún quedaba mucho camino por delante. Ayer, el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, recuperó el optimismo presentado por el Ejecutivo de Syriza, que el pasado jueves fijó mañana como plazo límite para cerrar el consenso y, aunque no quiso dar fechas concretas, si subrayó que las negociaciones se resolverán «en los próximos días».
El luxemburgués, eso sí, no se mostró tan esperanzado como lo hicieron desde Atenas un día antes e insistió en que el único escenario que contempla es que Grecia siga en el euro, aunque avisó de que todavía «se necesitan progresos adicionales» para alcanzar el esperado pacto, que se está dilatando ya más de un mes. «No quiero entrar en detalles, solo decir que esta cuestión, que es muy difícil, se resolverá en los próximos días y semanas», remarcó.
Las tres instituciones que forman la troika -la propia Comisión, el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Central Europeo (BCE)-, aunque a veces «tienen puntos de vista diferentes», trabajan «para el mismo objetivo», que es cerrar «un acuerdo» con la delegación helena, explicó, por su lado, un portavoz de Bruselas.
Mucho menos optimista se mostró el ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schäeuble, quien dudó de que se esté a las puertas de un consenso. 
«Las noticias positivas procedentes de Atenas no reflejan el estado de las conversaciones del Gobierno con los acreedores», aseguró tras acabar la reunión del G-7 en la localidad germana de Dresde.
En este sentido, recordó que el programa para Grecia vence a finales de junio y que todavía queda una larga lista de cuestiones técnicas por resolver.
Las tensiones con el Gabinete de Syriza acapararon buena parte de la atención de la cumbre internacional y llevaron, incluso, al secretario de Finanzas de EEUU, Jack Lew, a volver a recordar a los implicados en el diálogo la necesidad de llevar a cabo un acercamiento «constructivo y pragmático» con el Gobierno heleno, que «debe implementar las reformas».
«Somos conscientes de que las conversaciones son difíciles», reconoció, para agregar que es necesario «tomarse en serio las fechas límites».
Entre tanto, la nación mediterránea volvió a caer en recesión al comenzar el año, según datos de Elstat, que apuntaron que el PIB del país cayó un 0,2 por ciento en el primer trimestre del año, tras el retroceso del 0,4 por ciento de los últimos tres meses de 2014.