La tasa de paro baja del 10% en más de 130 municipios

J.M.
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La capital, el Alfoz y la comarca del Arlanza arrojan los mejores datos, y el norte de la provincia es la zona en la que la recuperación es más lenta

Si de algo ha presumido la provincia de Burgos en los últimos dos años ha sido por arrojar una de las tasas de paro más bajas de todo el país. La última Encuesta de Población Activa (EPA) la situaba en el 8,92% tras el primer semestre del año (en España era del 15,28%) y confirmaba, pese a ocultar algunos matices, la buena tendencia del mercado laboral. Sin embargo, las alegrías en ocasiones van por barrios ya que no en todas las zonas del territorio se respira el mismo optimismo.

Para conocer los datos de cada localidad, el último informe anual del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) muestra una fotografía fija a 1 de enero de 2018 con el número de demandantes de empleo y de afiliados a la Seguridad Social que permite, utilizando la metodología del INE para calcular la población activa, saber que en esa fecha eran ya 134 (de un total de 371) los municipios burgaleses con una tasa de paro inferior al 10%. Una cifra que seguramente habrá mejorado con el transcurso de este año.

La comparación entre municipios permite apreciar que no en todas las zonas de la provincia está llegando la recuperación al mismo ritmo. Por encima del resto, destaca en su conjunto la tasa de paro de la capital y del Alfoz. En Burgos se situaba en el 10,5%, pero donde las cifras son más que sobresalientes son en lugares como la Merindad de Río Ubierna (4,65%) y Villagonzalo (5,93%). Lo que antes de la crisis se denominaba como pleno empleo.

En el caso de la Merindad de Río Ubierna, se contabilizaban 851 afiliados a la Seguridad Social y únicamente 43 parados. En Villagonzalo la cifra era de 1.127 cotizantes frente a tan solo 67 desempleados.

Pero no son una excepción en el Alfoz, lugar donde residen muchos ciudadanos que trabajan en la capital. En Villalbilla era de apenas el 9,95%, en Villariezo del 4,65%, en Valdorros del 7,11%...

Aunque también próximos a la capital no son tan buenos los datos de la tasa de paro de Ibeas de Juarros (17,9%), aunque sí los de Castrillo del Val (8,89%).

Lo que también se advierte es que el norte de la provincia es quizás el más damnificado. En Miranda de Ebro la tasa de paro superaron el 20%, aunque aquí también cabe decir que en el ejercicio 2017 el número de demandantes de empleo cayó más del 14%.

En Medina de Pomar, y en localidades como Villarcayo, Oña y Frías se superó el 19% de la tasa de paro. En Trespaderne, también elevada, alcanzó el 17% y en el Valle de Tobalina, quizá la excepción, apenas rebasó el 13%. Es probable que el cierre de Garoña haya tenido alguna incidencia, aunque también coincide el hecho de que esta zona, a diferencia de otras del territorio, no disfruta de grandes vías de comunicación.

La excepción es Pancorbo, donde la tasa de paro a 1 de enero de este año se situaba en el 5,4% tras contar 315 trabajadores afiliados y solo 18 demandantes de empleo. Una localidad que no ha sido ajena a las inversiones ya que la Autoridad Portuaria de Bilbao ha realizado recientemente una inversión de más de 40 millones de euros en suelo burgalés, en la Terminal Logística Ferroviaria (Telof).

En la Bureba, la recuperación del mercado laboral parece que cuesta, a juzgar por la tasa de paro del 20,64% de Briviesca y la del 19,3% de Poza.

Donde las cifras sí son positivas es en la comarca de Odra. En Sasamón la tasa de paro estaba en el 7,2%, en Villadiego en el 10,2%, en Castrojeríz en el 10,4% y en Melgar de Fernamental en el 11,85%.

Parámetros muy similares se dan en la comarca del Arlanza, donde Lerma se situó en el 13% y Villalmanzo en poco más del 10%. En Madrigalejo del Monte, en los últimos años más popularidad por el crecimiento de la fábrica de Asti, la tasa de paro fue  del 2,83%.

En la zona de Pinares, los datos del SEPE son más contradictorios. Mientras en Salas, Huerta del Rey y en Pineda la tasa se movió en el 14,3%, en e 12,4% y en el 10,5%, en Quintanar y en Neila se fueron hasta el 26,2% y el 28,6% respectivamente. Cifras muy altas estas últimas aunque, también es cierto, de poblaciones con pocos habitantes.

En la parte sur de la Demanda hay mejores noticias ya que Covarrubias y Santo Domingo de Silos reflejaron tasas del 7,7% y del 8,5%.