Peligro por las bandas

Raúl Canales / Miranda
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Frenar a los carrileros del Girona es una de las grandes preocupaciones del Mirandés

El Girona es un equipo atípico a nivel táctico. Pablo Machín ha convertido el 5-3-2 en la seña de identidad del conjunto catalán y  los resultados le están dando la razón. Bajo ese dibujo aparentemente defensivo se esconde un rival al que le gusta tener la posesión, que llega con muchos efectivos al área rival y que figura entre los conjuntos más realizadores de la categoría.

Los gerundenses han recuperado la figura del carrilero y la explotan al máximo. Jugar con tres centrales permite a los laterales incorporarse continuamente al ataque y sorprender desde la segunda línea, siendo en muchos casos dos centrocampistas más.

Cifuentes es fijo en la derecha y ni siquiera la lesión de David Juncá, jugador al que siguen varios conjuntos de Primera para la próxima temporada, ha trastocado los planes del técnico ya que Machín ha encontrado en Sebas Coris, la nueva perla del filial,  a su reemplazante natural en la banda izquierda.

Y es que contar con dos laterales de largo recorrido es imprescindible en los esquemas del míster ya que no solo le permite mantener el orden defensivo con una línea  fija de tres centrales, sino que además aporta soluciones a un ataque que se acaba tornando imprevisible por la posibilidad de combinar el juego por fuera y por dentro. La calidad de Felipe Sanchón y el acierto rematador de Fran Sandaza, hacen el resto.

Por este motivo neutralizar las bandas es una de las grandes preocupaciones de Carlos Terrazas para el domingo. El técnico rojillo sabe que si frena las subidas de los carrileros gerundenses anulará una de las principales fuentes de peligro de su rival y en los entrenamientos semanales ha incidido en la necesidad de extremar la atención.

De este modo, Álex García y Jordi Pablo, que previsiblemente  regresará al once por el sancionado Pedro, tendrán trabajo extra en este encuentro ya que deberán apoyar más en las tareas defensivas.

Los números del Girona evidencian el acierto de la apuesta de Machín ya que los catalanes han marcado 41 goles y solo han recibido 27, siendo el segundo equipo que menos tantos encaja de la categoría.