Un joven de 19 años vecino de Aranda de Duero, de iniciales C.G.H., salvó ayer milagrosamente la vida al colisionar su coche con un camión en la conflictiva incorporación desde la antigua N-122 al tramo este de la variante de Aranda de la A-11 en Fresnillo de las Dueñas, donde precisamente finaliza la autovía convirtiéndose en una calzada con dos carriles y tráfico en doble sentido.
El accidente se produjo a las 11:30 horas a la altura del kilómetro 263, en lo que se conoce como la mojonera entre Fresnillo de las Dueñas y Vadocondes, que se ha convertido en un auténtico punto negro viario. Varias llamadas al Servicio de Emergencias Castilla y León 112 dieron aviso del percance en el que se vieron implicados un camión de matrícula portuguesa y un turismo, a consecuencia del cual resultó herido el conductor del coche, quien quedó atrapado en el interior del vehículo.
Inmediatamente la sala de operaciones del 112 dio aviso a la Guardia Civil, a Emergencias Sanitarias (Sacyl) y a los Bomberos del Parque Municipal Aranda de Duero, que acudieron al lugar para excarcelar al herido. El joven, quien según algunos testigos permaneció consciente en todo momento a pesar de la importancia de las lesiones, fue atendido en el lugar por los facultativos del Sacyl y posteriormente traslado al Hospital Santos Reyes de la capital ribereña por la UVI móvil desplazada.
El siniestro se produjo cuando el Opel Corsa en el que viajaba el joven como único ocupante procedente del casco urbano de Fresnillo, presuntamente se saltó el stop al intentar incorporarse a la N-122 en sentido Soria. En ese momento fue alcanzado de lleno en el lateral izquierdo por un trailer luso que circulaba en sentido Valladolid antes de que le diera tiempo a situarse en el carril central donde es preciso ceder el paso a los vehículos procedentes de la capital pucelana antes de realizar la incorporación definitiva a la calzada.
Elevada siniestralidad.
Tanto miembros de la Guardia Civil como operarios de mantenimiento de carreteras presentes en el lugar reconocían la elevada conflictividad de esta incorporación donde, según sus datos, en menos de medio año desde que se puso en marcha la variante que circunvala conjuntamente Castrillo de la Vega, Aranda de Duero y Fresnillo de las Dueñas ya se han registrado al menos media docena de percances de consideración -si bien por el momento no hay que lamentar ninguna víctima mortal-, al margen de otros de los llamados ‘de chapa’ y otro buen número de sustos.
Una situación que si bien atribuían en gran medida a que no respetan las señales, reconocían que también contribuía a la misma el diseño con sendos carriles centrales, uno con ceda el paso para incorporarse en sentido Soria y otro con un stop para abandonar la autovía en dirección Fresnillo de las Dueñas, «a los que -apuntaba un agente de la Benemérita- muchos conductores en nuestro país no están acostumbrados, por lo que casi hubiera sido mejor un cruce al uso».