Un total de 101 de los 803 propietarios de inmuebles del Valle de Manzanedo han recibido en las últimas semanas la comunicación de que el valor catastral de su propiedad ha sido actualizado y, por ende, deben abonar un mayor impuesto de bienes inmuebles (IBI). Cuadras, solares o casas en ruina que se han convertido en cómodas viviendas o inmuebles que han sufrido reformas y mejoras visibles se han visto afectados por esta actualización comandada por el Catastro, que ha levantado ampollas entre los afectados, máxime cuando en muchos casos -si la reforma se hizo hace más de cuatro años- deben abonar todo lo que no pagaron por su bien desde 2011, un abultado recibo que ya les ha girado el Servicio de Recaudación de la Diputación por encargo municipal.
En la mayoría de los casos, los afectados disfrutan de sus viviendas como segundas residencias y es que en el Valle de Manzanedo a pesar de contarse más de 700 casas, solo hay empadronadas 135 personas. Por ello, las voces críticas consideran que esta actualización es un varapalo que «en vez de premiar a los propietarios por tener sus casas de verano bonitas, lo que hace es sancionar a quien ha transformado una ruina y ha contribuido a embellecer el entorno». Asimismo, añaden que «muchas reformas las ha hecho los propietarios con sus propios recursos y de forma humilde para arreglar lo que muchas veces es una casa familiar». Para los propietarios que han visto multiplicarse exponencialmente sus recibos de IBI, «no es lo mismo el valor del suelo o de una vivienda en un pequeño municipio como es el Valle de Manzanedo que en otros puntos de la comarca», por lo que insisten en su malestar.
La alcaldesa, María del Carmen Saiz afirma que «auténticas mansiones tenían un valor catastral de tan solo 2.000 euros» y, por tanto, tributaban muy por debajo de su obligación. Asimismo, asegura que la medida ha sido iniciativa del Catastro y que el «Ayuntamiento lo único que hemos hecho es facilitarle la información que nos ha solicitado, porque no nos podemos negar a ello».
En el Valle de Manzanedo, el IBI tiene un tipo del 0,8%, el máximo permitido, un hecho que los afectados consideran que hace más daño aún a sus bolsillos. Por ello, parte de ellos anuncian que solicitarán por escrito al Consistorio que rebaje el tipo del IBI, teniendo en cuenta esta revalorización.
Ante ello, la alcaldesa, quien admite que el proceso ha generado numerosas quejas, señala que «cuando en 2011 elevó el tipo del IBI del 0,4% (el mínimo) al 0,8% automáticamente se puso en marcha una ayuda anual de 110 euros por cada empadronado». Para la regidora, esta ayuda que se cobra siempre que se justifiquen gastos por servicios de los que carece el Valle de Manzanedo, es una contrapartida al tipo del IBIdel municipio, donde por otra parte hace décadas que el Catastro no realiza una revisión completa.
«Si bajamos el IBI no se podrá dar esa ayuda que busca fomentar el empadronamiento o mantener servicios, como el wifi que tenemos en todos los pueblos». La alcaldesa sostiene, además, que con la recaudación del IBI, que supone más de un tercio de su presupuesto anual, «hemos arreglado carreteras, caminos o casas de concejo».