Miranda, la sartén de Castilla y León

R.C.G.-G.A.T. / Miranda
-

La ciudad ha registrado la máxima temperatura del verano en toda la Comunidad • Fue el 16 de julio, cuando se alcanzaron 39,1 grados

En la jornada pico, los termómetros al sol superaron los 40 grados. - Foto: G.A.T.

 
El otoño nos da la bienvenida poniendo fin a un verano irregular que se despidió ayer con lluvia y una jornada gris que simbolizó perfectamente lo que ha sido una campaña estival floja en la que sol y nubes se han alterando casi por igual. Eso sí, cuando ‘lorenzo’ ha salido, lo ha hecho con ganas, tanto que Miranda ha sido  el lugar donde se ha registrado la temperatura más alta de todo Castilla y León durante los últimos tres meses. 
Los asfixiantes 39,1 grados del pasado 16 de julio provocaron que más de uno pensara que en vez de por la calle La Estación estaba paseando en las proximidades de la Mezquita o la Alhambra, ya que la ciudad vivió un pico similar al de las localidades que han sido las mas calurosas de España este mismo verano: Córdoba (42,9º), Granada (42,7º) y Valencia (42,2º). 
El episodio de temperaturas extremas en esos días de mediados de julio se demuestra también con los datos de las piscinas municipales, ya que los mirandeses se vieron obligados a refugiarse en dichas instalaciones, que en esas jornadas, contabilizaron una media de usuarios mucho más alta con 3.102 personas en Anduva y 427 en Los Ángeles. 
Pero el horno se enfrió rápidamente ya que solo 24 horas después de que los termómetros estallaran, hubo que sacar nuevamente los abrigos ya que las temperaturas descendieron de forma vertiginosa situándose la mínima por debajo de los 10 grados y unas máximas con una bajada media de 13 grados. 
Ha sido la tónica habitual de la temporada veraniega en la ciudad, caracterizada por cambios bruscos, inestabilidad y muchas precipitaciones, incluso tormentas de granizo, como la que a finales de junio destrozó las casetas de San Juan del Monte, en la que cayeron más de 30 litros por metro cuadrado. 
Aún así, la anomalía térmica ha propiciado que en comparativa con ejercicios precedentes, el verano actual haya sido un grado más caluroso de media, que por ejemplo, el del año pasado, aunque la inestabilidad ha privado de hacer planes para disfrutarlo.