El Burgos CF está pendiente de fichar un portero que luche por el puesto con Mikel Saizar y Luca Zidane es uno de los nombres que está sobre la mesa. El cancerbero, que abandonará este verano el Real Madrid, quiere jugar en un equipo que le dé minutos y le permita seguir progresando, por lo que la opción de que recale en un Segunda B cobra fuerza.

El guardameta, hijo del exentrenador blanco,  defendió la temporada pasada la portería del Castilla y llegó a debutar con el primer equipo en el último partido de la Liga Santander ante el Villarreal. Aterrizó en la cantera merengue en 2004 y pasó por todas las categorías inferiores hasta lograr el sueño de estrenarse con sus ídolos.

Sin embargo, 14 años después, le ha llegado el momento de salir del club que le vio crecer en busca de más minutos y responsabilidad, al igual que lo hizo su hermano Enzo cuando se fue cedido al Alavés. El fichaje del arquero ucraniano de 19 años Andriy Lunin por parte del filial merengue le invita a abandonar la plantilla, aunque sea en calidad de cedido. Algunos medios deportivos sitúan su destino en Francia, donde tiene buen cartel al ser un fijo en las convocatorias de las categorías inferiores de la selección gala, pero el Burgos se encuentra al acecho.

impacto mediático. La llegada de Luca Zidane al conjunto blanquinegro, ocupando plaza de sub’23, supondría un impacto mediático muy importante para el Burgos CF, que sueña con hacer un proyecto ambicioso que le devuelva a la categoría de plata del fútbol español.

En caso de que se concretara la operación, el francés se vería las caras con su exequipo, ya que los castellanos jugarán la próxima temporada en el Grupo I.

El joven futbolista ha disputado un partido con el primer equipo del Real Madrid, el último de la pasada Liga Santander ante el Villarreal. El resultado acabó con empate a dos y el meta dejó alguna intervención de mucha calidad, aunque también pudo hacer más en el segundo tanto de los ‘amarillos’.