La Guardia Civil detuvo en Burgos  ayer por la mañana a dos personas vinculadas a la brutal agresión que sufrió una muchacha de 17 años de la capital en Villagonzalo durante la madrugada del pasado domingo, en las fiestas patronales del pueblo. Se trata de una joven y su novio, si bien la Benemérita mantiene abierta todavía la investigación y no descarta más arrestos por este caso.

 

Para identificar y localizar a los presuntos agresores ha sido fundamental la información que aportó la víctima a la Guardia Civil. Y es que incluso conocía de vista a la chica que la agredió. Según la denuncia que presentaron la afectada y su familia, cosa que hicieron el lunes -cuando ya tenían en su poder el parte de lesiones completo- los hechos se desarrollaron sobre las 4,30 de la madrugada del domingo.

La víctima acudió en coche a Villagonzalo Pedernales con dos amigos y una amiga. Estuvieron en la verbena y después se pasaron por el lugar donde estaban instaladas las barracas. Su grupo estaba jugando con una gorra de la muchacha que después resultaría agredida. Se la puso su compañera de fiesta y en ese momento un chaval de entre 22 y 25 años le quitó la visera y salió corriendo.

 

La dueña de la gorra fue tras ellos alejándose unos 20 metros del ferial, detrás de una tómbola,  con el fin de recuperar su prenda. Se la pidió y a cambio recibió un puñetazo en el rostro. Se marchó para contarles lo sucedido a sus amigos, pero sus agresores corrieron tras ella. Le propinaron más puñetazos en la cara hasta que cayó al suelo, donde recibió numerosas patadas. La chica no pudo más que protegerse de los golpes, hasta que perdió el conocimiento.

 

Los amigos no supieron qué hacer  en ese momento y telefonearon a su hermana, que vive en Madrid, la cual avisó a su padre, que fue quien recogió a la víctima en el lugar de los hechos. La trasladó al Hospital Universitario, donde quedó ingresada con el rostro totalmente desfigurado por los golpes. Presentaba varias lesiones, la más grave la fractura de los huesos propios de la nariz y del septo nasal, una contusión ocular y una abrasión en la rodilla izquierda, según el parte médico. Pero su familia señala ahora que empieza a resentirse su mandíbula. El lunes fue operada de la rotura de los huesos de la nariz y ya ha sido dada de alta, aunque su rostro está cubierto por una escayola y varias gasas que le colocaron los médicos para su recuperación.

 

La Benemérita conoció los hechos el mismo domingo, ya que la familia de la joven acudió hasta el cuartel para presentar la correspondiente denuncia, si bien finalmente no lo hicieron hasta el lunes, cuando ya contaban con el parte completo de lesiones. El Puesto Principal del Alfoz inició una investigación que por ahora se ha saldado con dos arrestos, si bien no se descartan más, pues el grupo que la agredió era más numeroso.