El informe hecho público por Izquierda Unida en el que se advierte de la existencia de 42 puntos de vertido no autorizados a los ríos de la comarca ha puesto en el punto de mira la política medioambiental del Ayuntamiento. En este sentido desde el equipo de gobierno se asegura que ya se está trabajando para corregir parte de estas irregularidades en varios barrios y pedanías de la ciudad.

En concreto desde el departamento de Obras se recuerda que se están dando pasos para  la conexión de Orón a la red de saneamiento, inversión que se ha retrasado por un conflicto con el Sepes.

Asimismo se ha iniciado el expediente para pedir autorización para los puntos de vertido de Bardauri y Suzana, que actualmente no cuentan con el visto bueno de la Confederación Hidrográfica del Ebro, organismo al que desde el Ayuntamiento también se está «insistiendo» para que acometa la ampliación de la EDAR. Con la depuradora se daría solución a las aguas fecales de Los Ángeles, Bayas y El Lago, que en su conjunto representan más de 750 habitantes.

«Se está trabajando en una situación que viene muy de atrás y que se ha comenzado a abordar en esta legislatura», apunta el concejal Adrián San Emeterio, quien no entiende porqué se critica al equipo de gobierno con este tema. «El informe se lo hemos facilitado nosotros porque no tenemos nada que ocultar», matiza.