La polémica en el Grupo VIII de Tercera División persiste con la competición en marcha. El Juzgado de Primera Instancia nº5 de Valladolid ha instado a la Federación Territorial de Fútbol a volver a inscribir al Real Burgos en la categoría y confeccionar un calendario con 21 equipos. El pasado fin de semana se jugaron los partidos de la primera jornada -con 20 equipos-, aunque el Real Burgos se desplazó a Zamora. 

Marcelino Maté, presidente de la Federación Territorial, afirma que ya cumplió la resolución del juzgado y recuerda que fue la Española, que «es la titular de los derechos de competición, pues Tercera es una categoría nacional», quien ordenó mantener el calendario con 20 equipos y sin el Real Burgos.

A día de hoy, los equipos desconocen dónde jugarán este fin de semana y el rival al que se tienen que enfrentar. Los cuatro clubes burgaleses, Arandina, Burgos Promesas, Bupolsa y Briviesca Norpetrol, se sienten los grandes perjudicados, mientras que el presidente del Real Burgos, Juan Antonio Gallego, declina hacer declaraciones a Diario de Burgos. Todos están a la espera y desconcertados.

recurso del real burgos. El pasado mes de julio se elaboró el calendario de Tercera División con 20 equipos y sin contar con el Real Burgos, que había perdido la categoría. Juan Antonio Gallego acudió a los tribunales de justicia para reclamar plaza, alegando que el descenso deportivo estuvo motivado por haber jugado tres partidos en una semana en mayo. Concretamente uno de ellos frente a la Arandina. El club ribereño también vivió esa situación pero no lo ve responsable de su no ascenso a Segunda B.

Presentó la misma demanda en Majadahonda, cuyo juzgado rechazó la petición; en Burgos, que resolverá el lunes; y en Valladolid, que sí atendió su petición y acordó la medida cautelar de inscribir al club burgalés en Tercera División. La Federación Territorial de Fútbol, presidida por el burgalés Marcelino Maté, acató la resolución y elaboró un calendario con 21 equipos.

La reacción de la Española no se hizo esperar y exigió volver al calendario inicial de 20 equipos como organizadora de la competición de Tercera y la titular de los derechos de competición. En Madrid no constaba el auto del juzgado de Valladolid. Se volvió al calendario inicial con el consiguiente trastorno para todos los equipos. Toda la planificación se fue al traste. «Íbamos a jugar en casa contra el Júpiter el sábado y terminamos jugando en Ávila, el domingo», constata José Luis Fernández Manzanedo, presidente del Burgos Promesas. Lo mismo le ocurrió al Bupolsa, que en principio descansaba y terminó yendo a Palencia, y peor lo pasó el Briviesca Norpetrol. 

El equipo burebano preparaba su debut en Tercera con esmero. Recibiría a La Granja en la segunda jornada y le quedaban por pintar las líneas de campo y engalanar el recinto deportivo. Con el cambio, se estrenó una semana antes frente a la Gimnástica Segoviana. «Tuvimos que hacer todo deprisa y corriendo», recuerda el presidente Diego Dávila.

A todos los trastornos de logística hay que sumar el deportivo. El técnico de la Arandina, Javier Álvarez de los Mozos, explica que «la semana anterior me fui a ver el Uxama y después jugamos con el Bembibre. Toda la preparación se fue al garete».

Todos salieron perdiendo pero lo asumieron con deportividad.

Esta semana, cuando ya están preparando su segundo compromiso liguero, los encuentros vuelven a estar en el aire. El Juzgado de Valladolid insta a la Territorial a mantener la inscripción del Real Burgos en Tercera. De cumplirse la medida cautelar Briviesca volverá a jugar en casa; el Burgos Promesas y el Bupolsa repetiría fuera y la Arandina viajaría al campo de La Virgen del Camino, mientras que el Real Burgos recibiría a La Bañeza en San Amaro. Pero la pregunta es clara ¿qué pasa con lo acontecido en la jornada ya disputada? ¿Valen los resultados? ¿Se mantienen las sanciones como la de Germán Marijuán de 2 partidos? ¿Quién se hace cargo de los gastos ocasionados?

Manzanedo lamenta «la indefensión de los clubes», mientras que todos piden recuperar la normalidad para centrarse en lo deportivo. «Tenemos que gestionar muchas cosas y generar recursos y con esta situación es muy difícil», confirma Cámara.

Javier Álvarez de los Mozos argumenta que «el fútbol es capacidad de adaptación» y opta por centrarse en lo eminentemente deportivo aunque afirma que «supongo que las dos partes defienden su postura pero el resto de los equipos estamos en una situación muy extraña».

El desconcierto es mayúsculo y los clubes permanecen a la espera de acontecimientos. Saben que la situación no se cierra con la providencia del Juzgado y que habrá más novedades. El presidente del Bupolsa lo tiene claro «si no se resuelve pronto, los equipos deberíamos parar», aunque hasta entonces ¿dónde jugamos?