Un incendio en una de las enormes piladas de madera reciclada, que se utiliza para la elaboración del tablero de partículas, del parque del complejo de Kronospan en Castañares mantuvo ayer en jaque a los equipos de contraincedios de la planta y a los bomberos de Burgos, que consiguieron a primera hora de tarde controlar el siniestro, aunque no extinguirlo ya que el único procedimiento para acabar con este tipo de fuegos latentes es dejar que se consuma, por lo que se calcula que se tardará varios días en que quede completamente extinguido a la vista del material acumulado. Una columna de humo, que no es tóxico, visible no solo desde el barrio sino también desde otros puntos de la ciudad, es la evidencia exterior de este incendio, que no afectó a las instalaciones del complejo fabril ni causó daños personales, aunque sí algunos materiales, pero de escasa importancia, apenas una rueda de un camión y unas pequeñas vallas de plástico, según explicaron desde la empresa.
El incendio fue advertido poco antes de las dos de la tarde por el personal de Kronospan, cuyos responsables activaron el plan de emergencia y movilizaron los equipos antincendios de que dispone la factoría. Ante la magnitud de las llamas dieron también aviso al parque de Bomberos de Burgos, que enviaron cuatro dotaciones. La rápida intervención de estos profesionales, así como de una cuadrilla de las brigadas forestales de la Junta, que controló varios conatos de incendio por pavesas lanzadas por el viento en las riberas del cauce cercano a Kronospan, impidieron que las llamas afectaran a la factoría y al entorno natural, así como a otros montones de madera reciclada, viruta y serrín apilados también en el citado parque maderero que es utilizado como depósito de material.
Un helicóptero del dispositivo contraincendios forestales de la Junta sobrevaloró la zona, pero los técnicos consideraron que no era necesaria su utilización para sofocar la llamas porque estaban controladas y su efectividad sobre este tipo de fuego ‘subterráneo’ era prácticamente nula.
Bomberos y personal de Kronospan se aprestaron a seguir apagando el fuego y a refrescar la montaña de madera dejando que siguiera la combustión. Paralelamente, operarios de la empresa, con excavadoras y camiones acometieron allí donde era posible trabajos de retirada de madera y viruta de los extremos de la enorme pila para eliminar material de combustión al fuego. Asimismo se trataba de controlar posibles desprendimientos y deflagraciones, que pudieran provocar que el fuego se extendiera a otras zonas o alguna chispa llevada por el viento prendiera en los montones de serrín cercanos, afectara a la construcciones de la factoría o se propagara por la ribera del cauce fluvial y los árboles de la ribera. Esta fue la preocupación de los responsables de los bomberos y de la empresa.
A falta de concluir las investigaciones del suceso, la dirección de Kronospan sostuvo en un comunicado que la explicación del fuego es que la pilada entró en combustión espontánea debido a las altas temperaturas de estos días. Por otro lado, se indicó que el siniestro no afectará a la actividad de la factoría ni «al desarrollo de las obras, que avanzan según lo previsto». La planta de Kronospan en Burgos se halla inmersa en un proceso de remodelación integral que la convertirá en una de las fábricas de producción de tablero de partículas más modernas de Europa. La primera fase de las obras estará finalizada a finales de septiembre», añaden
Al cierre de la edición, un retén de bomberos, agentes y personal de la empresa seguían trabajando en la zona para evitar que el incendio se reavivase, apagar las llamas que puntualmente reaparecían y enfriar todo el área del siniestro y el entorno.