Ellos son sus propios enemigos. Solo la desidia o la falta de fortuna, como ocurrió contra el Dépor o el Valencia, han sido capaces de parar esta temporada a un Barça que es un máquina perfecta de generar fútbol de alta escuela. Una versión mejorada del equipo de Guardiola, que combina el juego de toque con contragolpes letales, haciendo imposible a los rivales adivinar por dónde les llegará el siguiente golpe.

La última demostración del potencial culé llegó la pasada semana con la victoria por aplastamiento (7-0) ante un Valencia, todo hay que decirlo, que no atraviesa sus mejores momentos. Un triunfo que permitió a Luis Enrique saltar al campo en la vuelta de las semifinales de la Copa del Rey con el equipo suplente, un lujo solo al alcance de un club como el Barça.

Con la clasificación para la final, los de la Ciudad Condal siguen batiendo récords, ya que acumulan 29 partidos sin perder -plusmarca histórica del club.

Desde la temporada 2008-09, los catalanes se han clasificado para seis finales de Copa. En su Historia, los azulgranas han disputado 37 y han ganado 27, por lo que aspiran a agrandar aún más su control en esta competición.

Ese dominio, que no se evidencia solo en el ‘Torneo del KO’ sino en el panorama internacional (la pasada campaña logró cinco de seis títulos posibles), tiene como gran protagonista a Leo Messi, un hombre que está cambiando la Historia del fútbol y hace que los rivales se muestren impotentes cuando tiene el balón en los pies. A su faceta goleadora, el ariete rosarino ha añadido su nueva versión de ‘pasador’.

Si a eso se le suma que le acompañan Neymar y Luis Suárez (30 goles en 29 partidos), la mezcla es perfecta. La buena sintonía entre los tres ‘cracks’, que en un principio se puso en duda, es lo mejor que le ha podido pasar a una escuadra que lleva camino de lograr otra temporada redonda.

Aunque aún es pronto para sacar conclusiones, los de Luis Enrique ya tienen asegurada una final de Copa, son líderes en la Liga con una ventaja considerable y solo una debacle podría hacer que el Arsenal les deje fuera de la Champions a doble partido. Un equipo, el londinense, con mucho nombre, pero que ha sido víctima de los culés en competición europea en repetidas ocasiones.

El potencial  azulgrana, con los tres de arriba ‘enchufados’ y con Busquets, Iniesta y Rakitic cubriéndoles las espaldas, parece no tener freno.

El único conjunto capaz de pararles, por presupuesto y jugadores, es el Real Madrid, el mismo que sucumbió por 0-4 en el Santiago Bernabéu y que solo cuenta con la novedad de Zidane en el banquillo.

¿Quién va a ser capaz de parar a este Barcelona? La recurrida respuesta de las lesiones se ha quedado sin argumentos, ya que Neymar y Suárez tomaron el relevo cuando la ‘Pulga estuvo más de dos meses lesionado.

Lo único que puede condenar al Barça es la suficiencia, el exceso de confianza y la dejadez. Algo poco probable conociendo el inconformismo de los jugadores y el espíritu ganador de Luis Enrique.

un equipo de récord. Tras el empate en Mestalla, el récord de duelos invictos de los catalanes se ha situado en 29. Desde el 3 de octubre del año pasado, cuando el Barça perdió en el Pizjuán (2-1), han transcurrido 129 días, en los que los de la Ciudad Condal se han consolidado al frente de la Liga y han conquistado el Mundial de Clubes y la clasificación para los octavos de la Champions.

En estos 29 choques, los azulgranas han conseguido 23 victorias y seis empates. Ha sumado 87 goles (3 tantos por envite) y han encajado 15 (0,5).