El Centro de Formación Las Merindades, dependiente de la Mancomunidad que con el mismo nombre integran los ayuntamientos de Medina de Pomar, Villarcayo y Espinosa de los Monteros, clausuró ayer el quinto curso de cocina impartido en sus aulas con un balance más que positivo. Desde su arranque a finales de 2012, más de la mitad de los alumnos han encontrado un empleo o han puesto en marcha negocios propios de hostelería, optando así por el autoempleo, y de los 15 que iniciaron este último, ocho se han insertado en el mundo laboral con un contrato de trabajo.

Ante estos datos, la directora del centro, Isabel Fernández-Rivera, mostró su satisfacción al comprobar el éxito en la inserción laboral que han tenido los 75 alumnos que han pasado por los cinco cursos ya celebrados en el centro, con sede en el antiguo colegio de Villarcayo. El curso que ayer clausuró el gerente del Servicio Público de Empleo de Castilla y León en Burgos, Fernando Millán, ha costado 40.800 euros que ha aportado íntegramente este departamento de la Junta de Castilla y León con el apoyo del Fondo Social Europeo.

El curso, que tiene un elevado coste, debido entre otros motivos al uso constante de materias primas, ha proporcionado desde el pasado 31 de marzo un total de 390 horas de formación a sus alumnos, todos ellos desempleados. Fueron más de sesenta los que optaron a una de sus quince plazas   -en algunas ocasiones han sido más de cien los aspirantes-, lo que también evidencia la demanda de formación en esta rama, como destacó Fernández-Rivera. Este curso daba continuidad a un curso anterior de cocina y con él varios alumnos han completado las 800 horas del itinerario de cocina completo.

De este modo, los alumnos obtendrán un certificado de profesionalidad que les capacita para el sector de la hostelería o sectores y subsectores de prestación de servicios. Si optan por continuar su formación, Millán García les recomendó que «se centren en la específica del ramo de la cocina» y no dispersen sus esfuerzos, a lo que añadió que «las estadísticas demuestran que los desempleados que más formación tienen son los que más posibilidades tienen de trabajar».

Respecto al centro Las Merindades, Fernando Millán, recordó el apoyo que ha recibido del ECYL «desde un primer momento» y lo describió como «un recurso muy importante para la comarca». En los planes a corto plazo del centro se encuentra la solicitud de dos nuevos cursos de operaciones básicas de cocina y de cocina, que previsiblemente comiencen el próximo diciembre. No obstante, el centro no descarta optar a nuevos cursos del ramo de hostelería, como los dedicados a las tareas de atención de barra, jefes de sala o cátering, entre otros.