De capilla a sala de cultura

A.C. / Villarcayo
-

El Ayuntamiento villarcayés prevé estrenar en primavera los 400 metros cuadrados del salón en que se está convirtiendo la capilla de la residencia tras una inversión de 150.000 euros

Ahora ya se han renovado completamente la cubierta y maltrecho alero. - Foto: A.C.

La original capilla de estilo alpino del complejo de la residencia Las Merindades de Villarcayo se está convirtiendo en un amplio centro cultural, que también hará las veces de salón de actos del vecino colegio Princesa de España. La alcaldesa de Villarcayo, Mercedes Alzola, espera poder estrenarlo esta primavera, cuando concluya la inversión de 150.000 euros que está llevando a cabo el Ayuntamiento en este espacio de más de 400 m2 y con capacidad para más de 350 personas.

Diseñada por Celestino Martínez, Julián Larrea y Ramón Uribe, la capilla de la antigua residencia de Las Merindades levantada a principios de los años sesenta, sufría un grave deterioro en su cubierta. Los agujeros dejaban pasar el agua y tras muchos intentos de encontrar apoyo en la Administración regional para financiar las obras, el equipo de gobierno decidió afrontar en solitario esta reforma el pasado año ante el peligro de ruina del inmueble.

La idea inicial era que el altar de la capilla fuera móvil y de este modo, el inmueble se pudiera utilizar  para el culto religioso -en ella se han casado centenares de parejas de localidad- y para celebrar actos culturales o de carácter educativo. Finalmente, el altar de granito tenía un peso tan elevado y unos anclajes tan fuertes al suelo que no ha podido ser conservado y ha tenido que ser despedazado para separarlo del suelo. Ante este hecho, el equipo de gobierno ha desechado la posibilidad de volver a celebrar ceremonias religiosas en la capilla, que quedará exclusivamente como centro cultural.

La empresa de construcción Javier Basurto inició el pasado otoño una complicada obra de renovación de su cubierta de pizarra con una caída del cien por cien que exigía instalar un complejo andamiaje en todo el tejado. Los trabajos en el tejado, adjudicados por 120.000 euros, han concluido ya con éxito y los operarios trabajan estos días en la restauración del campanario, ubicado en una moderna torre de hormigón ubicada junto a la capilla. Durante años, la torre del campanario ha mantenido vallado su contorno por los desprendimientos de losetas de piedra que caían de los tejadillos que protegen las campanas y a partir de ahora se podrá pasar a su lado sin peligro.

Para completar la restauración de la capilla, la última junta de gobierno aprobó nuevas mejoras que estarán listas «entre abril y mayo». Esta nueva partida de otros 30.000 euros se destinará a la construcción de una acera exterior para evitar humedades, al pulido y barnizado del suelo de madera de la capilla, a la instalación de un sistema de calefacción, a adecentar y pintar las estancias que antes componían la sacristía y a ampliar y acondicionar el nuevo escenario. Con una superficie de unos 70 metros cuadrados, el nuevo escenario levantará casi un metro sobre el nivel del suelo y se equipará con un sistema de iluminación.