La remodelación del pavimento de la Plaza Mayor tendrá que esperar al menos hasta 2016. La actuación necesitará de una partida específica en las cuentas del próximo año después de que Intervención emitiera un informe contrario a que se ejecutaran por fases y con cargo a la inversiones sostenibles.

Este escenario sería el menos malo, porque si el equipo de Gobierno no cuenta con apoyo para la aprobación del presupuesto y se prorroga el actual no resultaría posible acometer esta actuación.

El concejal de Fomento, Jorge Berzosa, reconoce la compleja situación pero confía en que finalmente las conversaciones con el resto de los grupos municipales consigan sacar adelante las cuentas municipales para el próximo ejercicio. «Tenemos que poner sobre la mesa de negociación de los presupuestos las principales inversiones de la ciudad porque de lo contrario no será posible llevar a cabo ninguna actuación».

La previsión era dedicar 1,3 millones a la plaza en 2015 y continuar las obras en una segunda fase en 2016, con otra aportación de 1,2 millones.

Precisamente la Gerencia Municipal de Fomento aprobó en su reunión de ayer un reconocimiento extrajudicial de crédito para abonar 50.166 euros a la empresa Prointec por la redacción del proyecto de la Plaza Mayor, que él equipo de Gobierno logró sacar adelante con el apoyo de Ciudadanos.

La actuación proyectada consistiría en sustituir el fallido ladrillo clínker por placas de granito rojo como el existente en la travesía de Entremercados. En las filas del PP siempre consideraron un fiasco el proyecto, achacando la responsabilidad al Ejecutivo de Ángel Olivares, que seleccionó los planos en cuestión. Por contra, desde el PSOE defienden que el material estaba bien elegido y que fue una presurosa ejecución (a manos de la empresa Procorsa) y la permisividad con la que han desfilado los vehículos de carga y descarga sobre ella lo que ha arruinado una inversión que se acabó elevando por encima de los 9 millones de euros.

La plaza es objeto de continuas reparaciones que ya han costado más de 200.000 euros a las arcas municipales, aunque lo peor es que no sirven de nada. Algunas patologías, como las que afectan a las juntas de dilatación, no tienen solución a juicio de los técnicos.

Otros asuntos

Por otro lado, el consejo de la Gerencia de Fomento aprobó el estudio de detalle de la parcela de la calle La Chopera para la ampliación del colegio Sagrada Familia. Se trata del solar que se encuentra al comienzo de lo que fuera el Dos de Mayo y que, de hecho, proviene de aquella operación urbanística.

Está previsto levantar un nuevo aulario, un patio de recreo y un polideportivo, así como plazas de aparcamiento. La ampliación de la SAFA es un proyecto que lleva años rondando para albergar a los más de 700 alumnos actuales.

También se aprobó la modificación del PGOU para actualizar el catálogo de árboles. Por primera vez en la historia de la ciudad existe una protección específica para los ejemplares singulares de la ciudad, es decir, aquellos de especial valor. Hay más de 300.