Hermanas Hospitalarias piden una planta del Divino Valles

F. TRESPADERNE
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La orden religiosa solicita las instalaciones a la Diputación, que se las tiene cedidas a la Junta, para trasladar el servicio de atención a personas con discapacidad intelectual mientras reforma su residencia actual, en la calle Delicias

El equipo de gobierno de la institución provincial, con el apoyo de resto de grupos, ha dado un primer paso para atender una petición de las Hermanas Hospitalarias de Burgos en la que solicitan la cesión, durante un  plazo no inferior a los 18 meses, de la sexta planta del viejo hospital Divino Valles, con fin de trasladar a estas instalaciones su servicio de atención a personas con discapacidad intelectual mientras realizan la reforma del centro asistencial e instalaciones que tienen en la calle Delicias de la capital.

Ramiro Ibáñez, diputado responsable del Servicio de Asesoramiento Jurídico y Urbanístico a Municipios y Arquitectura (Sajuma), que es el encargado de tramitar la solicitud de las religiosas, manifiesta que, en principio, la propuesta se ha valorado de forma positiva, «pero todavía hay que recorrer un largo camino hasta llegar a la cesión de esa planta, ya que el edificio, que es de la Diputación,  está cedido a la Junta y tendremos que solicitar a la Administración  regional la cesión temporal de esa zona para poder atender la petición de las religiosas, afirma, a la vez que considera positivo que en este edificio vacío «se pueda prestar un servicio a estas personas».

A la vez que se solicita la autorización de la Junta, el equipo de gobierno encargará a los servicios jurídico de la institución que redacte un convenio en el que se reflejen las compromisos que adquiere cada una de las partes, como por ejemplo el acondicionamiento de los espacios, los gastos de mantenimiento o la duración de la cesión. «Se trata de dar forma jurídica a este convenio, ya tenemos uno firmado con el Instituto de Medicina Legal, y someter el mismo a la aprobación de la junta de gobierno y del pleno», afirma Ibáñez, quien insiste en que lo importante es que «los espacios del Divino Valles se destinen a mejorar la calidad de vida de los burgaleses y atender esta petición de las Hermanas Hospitalarias va en esa dirección».

Aunque todavía no hay ninguna fecha establecida, Ibáñez señala que la intención  de las religiosas es «trasladarse en un plazo corto de tiempo» y que en principio ocuparían la última planta de viejo hospital provincial durante unos 18 meses, es decir el tiempo previsto de duración de las obras proyectadas en su centro asistencial, que seguirá funcionado para prestar otros servicios. «En concreto, para lo que nos han solicitado la cesión de la última planta es para atender a las personas con discapacidad intelectual, dependientes de la Junta de Castilla y León, que ahora están en su centro asistencial», señala Ibáñez, quien espera que la tramitación no se dilate y se pueda aprobar el convenio este año.