Investigan cómo y dónde vivían los antiguos pobladores del Alto Arlanza

B. Antón / Quintanar
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El trabajo de campo del equipo científico de la Universidad de Barcelona cuenta con la colaboración del Miniesterio de Economía, la Junta, el Comunero de Revenga y la Diputación

Durante esta primera semana, los arqueólogos han procedido a limpiar la zona del yacimiento de Revenga. - Foto: Azúa

Conocer cómo y de qué forma vivían las unidades familiares que poblaron la zona del Alto Arlanza, qué tipo de gestión aplicaban a sus espacios residenciales y qué patrones de explotación desarrollaban sobre el territorio circundante son los objetivos del proyecto de investigación que arrancó hace unos días en el entorno de la necrópolis de Revenga y que se extenderá hasta el día 14.

A través de lo que allí se observe durante estos días, el equipo de investigación que traba sobre el terreno pretende poder definir la secuencia temporal de estos asentamientos y analizar la composición de sus estructuras domésticas, resolviendo las múltiples incógnitas que todavía hoy plantean estos testimonios.

Titulado ‘La formación del paisaje medieval: el origen de la red aldeana en el alto Arlanza’, este proyecto está liderado por el Grupo de Investigación en Arqueología Medieval y Postmedieval de la Universidad de Barcelona y cuenta con la colaboración del Ministerio de Economía y Competitividad, la Junta de Castilla y León, el Comunero de Revenga y la Diputación Provincial de Burgos. Además, tendrá continuidad durante el verano del 2015, ya que cuenta con dos anualidades.

Como ocurre en otros lugares, en Revenga, los problemas de visibilidad que plantean los testimonios materiales de estos asentamientos han provocado que el análisis arqueológico tradicional se haya focalizado en el estudio exclusivo de los elementos funerarios, por lo que se dispone de un registro parcial y deficitario de las evidencias aldeanas.

Primeros trabajos

La hipótesis de partida de este proyecto de investigación se sustenta en la presencia de este conjunto de asentamientos altomedievales que se distribuyen por el territorio en estudio, por ello es preciso elaborar un registro arqueológico completo de estas evidencias, a fin de contribuir a la construcción de una interpretación consistente de un modelo de poblamiento altomedieval que se desarrolla al norte del Duero.

Los primeros trabajos de investigación realizados en el trienio 1995-1998 se dirigieron a documentar de forma exhaustiva los grandes conjuntos funerarios de Cuyacabras, Revenga y Regumiel de la Sierra. Nuevas planimetrías y una completa documentación gráfica ampliaron en el caudal de datos sobre los testimonios funerarios aportados por el profesor Del Castillo.

Puesta en valor

La etapa 2000-2004 estuvo dirigida a la adecuación y puesta en valor de los algunos yacimientos  como Cuyacabras, Cueva Andrés, La Cerca y Revenga. A través de tres convenios firmados entre los ayuntamientos implicados y la Universidad de Barcelona, financiados por la Junta de Castilla y León, se ha impulsado la revalorización adoptando las medidas para convertirlos en yacimientos visitables. La limpieza, vallado y la señalización han contribuido a aproximar estos testimonios arqueológicos hacia el público en general. Paralelamente, se ha trabajado y se trabaja en la presentación de unas monografías didácticas sobre estos enclaves. Ahora, las investigaciones científicas se centrarán en revelar dónde y cómo vivían aquellos pobladores cuyas tumbas ya han sido estudiadas en numerosas ocasiones y puestas en valor.