Censuran una muestra de Ausín Sainz por sus imágenes de la infanta y Rajoy

I.L.H. / Burgos
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El Ayuntamiento de Salamanca, propietario del Centro Municipal Integrado Julián Sánchez 'El Charro', procede a su desmontaje por ser una exposición «inadecuada para las familias»

‘El baile de la patata’ (al fondo) y ‘La joya de la corona’ son obras de 3 metros de altura realizadas en técnica mixta sobre tela.

«Nunca me habían censurado una exposición ni habían mandado a la policía contra mí haciéndome sentir como un delincuente. Es algo surrealista y vergonzoso, que no se entiende en el siglo XXI». Víctor Ausín Sainz (Burgos, 1969) sigue alterado dos días después de que el Ayuntamiento de Salamanca, propietario de la sala de exposiciones del Centro Municipal Integrado Julián Sánchez El Charro, haya procedido al desmantelamiento de la muestra No apta para todos los públicos que se iba a inaugurar el viernes.

Las obras de la polémica que incluye esa exposición hacen referencia a la infanta Cristina, Mariano Rajoy y Luis Bárcenas. Los dos primeros aparecen pintados con heces en la cabeza sobre telas estampadas, mientras que el ex tesorero del Partido Popular acompaña al presidente del Gobierno sujetando con la frente una patata. «Mis trabajos son siempre de denuncia social y la corrupción es uno de ellos», clama el artista burgalés que exponía junto a estas piezas otras en las que alude a la nueva Ley de Seguridad -conocida como Ley Mordaza-, Coca Cola o la ‘animalización’ de los seres humanos.

Para censurar la muestra el Consistorio alega que contiene «imágenes inadecuadas para el público eminentemente familiar que acude a la sala». Ausín Sainz, cuya obra se ha expuesto repetidas veces en el Consulado del Mar, se defiende aludiendo a una muestra de similares características que presentó hace dos años también en Salamanca, en el Palacio Gardigrande «sin ningún problema». «Se titulaba Viva España. Desarrollé el tema de la especulación urbanística, la violencia machista, o una crítica a la actuación de los políticos con un muñeco de vudú interactivo que el visitante podía utilizar colocando la máscara con la cara del político que quisiera, pudiendo desahogarse a su gusto». Ese vudú, concretamente, también pudo verse hace unos años en una de las exposiciones que realizó en Burgos.

Las reacciones a la decisión del Ayuntamiento no se han hecho esperar en las redes sociales: «He recibido muchos apoyos de colectivos de artistas, principalmente. Y me han ofrecido lugares donde exponer, entre ellos Espacio Tangente», añade.