"Los yihadistas se radicalizan en contactos cara a cara"

I.E.
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El profesor y experto en terrorismo islamista Fernando Reinares desvela que 7 de cada 10 terroristas se relacionaroncon otros activistas o tenían familiares integristas, lo que relativiza la importancia de las redes sociales en ese proceso

Fernando Reinares, catedrático y especialista en terrorismo islamista, lleva años dando conferencias por medio mundo y domina las técnicas para ganarse al público en pocos minutos. Ayer lo hizo en la primera conferencia de las XXI Jornadas de Derecho, Política y Defensa, que organizan la Facultad de Derecho de la UBUy la Subdelegación de Defensa en Burgos, y que llevaba por título ‘La amenaza yihadista: el caso de España en el contexto europeo’. Recordó que en noviembre de 2000, en la misma cita de esta Universidad, exhibió una foto en la que aparecía Bin Laden. Ayer también la mostró, pero para preparar el golpe de efecto que tenía planeado para los asistentes. «Lo que no sabía en aquel momento es algo que supe en 2015; que esa imagen estaba trucada, estaba incompleta; faltaba la mitad, la que mostraba a su lado a Mustafá Setmarian», señaló. ¿Y quién era éste? Pues nada menos que «el hombre que fundó la primera célula Al Qaeda en España, en 1994».

Fue sin duda el prólogo perfecto para mantener la atención del público del Aula Romeros, pues con él dejó claro que la presencia del yihadismo en España era muy anterior al 11-M (año 2004). Asimismo, subrayó que Al Andalus ya se hallaba en el primer manifiesto de índole salafista que enumeraba los 17 territorios usurpados al Islam. Con lo que España siempre ha estado en el foco de la yihad.

Recordó que en la primera gran operación que realizaron el CNI y la Guardia Civil contra el terrorismo islamista en España, en 2001, fue detenido Abu Dahdah, con conexiones con los autores del atentado del 11-S en Nueva York. Y de ella se libraron, manifestó, otros integrantes de Al Qaeda en España que se hallaban «en la periferia» de la organización. Algunos de ellos fueron los que perpetraron el ataque del 11-M en Madrid, como El Chino o Jamal Zougam, quienes en marzo de 2002 ya operaban desde un piso de Madrid en la preparación del 11-M.

Con la irrupción del Estado Islámico en escena tras la Guerra de Irak, el fenómeno yihadista se hace bipolar, «con dos organizaciones que compiten por la hegemonía, pero no combaten por alcanzarla». De hecho Reinares no descarta que «se produzca una fusión renovada en el futuro». Este cambio tiene sus efectos en España, donde «el foco se traslada de Madrid a Cataluña».

España no se hallaba, en un principio, entre el grupo de países donde pone el punto de mira la extraordinaria movilización yihadista que se produce después de 2012 en Europa. «Es en Francia, Reino Unido, Bélgica, Holanda, Suecia, Austria y Alemania donde más se desarrolla este fenómeno, debido a que allí ya había segundas y terceras generaciones de musulmanes radicalizados», explicó.

Pero el atentado de Barcelona de 2017 reveló que ISISdisponía de  estructura en Cataluña. Ya en 2008 fue desbaratado un atentado contra el metro de la Ciudad Condal. Reinares ofreció datos sobre los factores que influyen en la radicalización de musulmanes españoles. 7 de cada 10, sostuvo, han tenido contacto -físico, cara a cara- con activistas ya detenidos -incluso presos- o tenían parientes o amigos integristas. La mayoría expresa su preferencia por pertenecer a células y redes organizadas, no son partidarios de actuar por su cuenta, lo que pone en entredicho el mito de los lobos solitarios.