El conductor del turismo cree que el camión se le viene encima, da un volantazo, derriba una farola, se empotra con el quitamiedos, se sube a la acera, el poste del alumbrado cae sobre una vivienda, daña el canalón y descoloca varias tejas.Como caen las fichas de dominó y en cuestión de segundos se desencadenó un accidente en la angosta travesía de Castañares, cuya peligrosidad denuncia desde hace años el alcalde de esta pedanía, Manuel Dueñas.     

Afortunadamente, ningún vecino caminaba por la acera o el pequeño jardín en el que se detuvo el coche, ni tampoco había nadie en la casa. Los únicos lesionados fueron los dos ocupantes del Mercedes, aunque en principio no de carácter grave. Peor parado resultó el vehículo, con cuantiosos daños materiales sobre todo debido a la colisión contra la valla de protección de la acera, que destrozó parte de la carrocería.

El siniestro se produjo a las 15.50 horas, según la primera llamada de aviso recibida por elServicio de Emergencias 112 Castilla y León, frente al restaurante El Descanso, en los número 16-18 de la calle Mayor de Castañares. Una dotación de Bomberos salió del Parque de Burgos, aunque por el camino confirmó que no había atrapados. También fueron alertados Sacyl, que envió una ambulancia de soporte vital básico, y la Policía Local de Burgos, ya que este tramo está considerado como travesía urbana. La circulación solo tuvo que ser interrumpida para la retirada del automóvil siniestrado, al quedar en la acera.

Los bomberos comprobaron los daños de la fachada del edificio afectado, limpiaron el tejado para evitar desprendimientos, aseguraron los cables de la farola municipal hasta que llegó Urbalux. Personal de mantenimiento de la Nacional 120 se encargó de limpiar los restos de la colisión.

Al parecer, el conductor explicó que tuvo la impresión de que iba a chocar con un transporte pesado y le esquivó, por lo que se produjo el siniestro. E.R.R., de 56 años, y la mujer Y.F.A., de 59, fueron evacuados en ambulancia al HospitalUniversitario.