La GuardiaCivil retiró material caducado en la inspección previa a la sesión de fuegos artificiales del lunes, el día grande de los Sampedros. La Intervención de Armas y Explosivos de la Comandancia de Burgos encontró 29 carcasas de 150 milímetros, en cuya etiqueta figuraba la fecha de caducidad en el año 2014.  También faltaba una batería de 100 disparos de 20 milímetros, que había sido sustituida sin autorización por otra con el mismo número de disparos pero del calibre 30 mm.

El citado material, tanto el caducado como el sustituido sin permiso, fue retirado con la obligación de retornar al taller de origen para su destrucción o devolución al proveedor, según informa la Benemérita en un comunicado de prensa.

Se levantó acta al considerar que la empresa, la leonesa Pibierzo, podría haber incurrido en una infracción grave contemplada en el Reglamento de Artículos Pirotécnicos y Cartuchería en concordancia con la Ley de Seguridad Ciudadana.

Sin embargo, la Guardia Civil aclara que su intervención no tuvo repercusión en el espectáculo en sí, ya que el material requisado fue sustituido por la propia empresa por otro que, una vez inspeccionado y validado, se añadió al resto  para su lanzamiento.

En el accidente con 24 heridos de los fuegos artificiales del año  pasado, los especialistas de los Tedax de la Policía Nacional encontraron a posteriori carcasas de material caducado.Sin embargo, los agentes de la Guardia Civil no detectaron su presencia en la inspección previa, preceptiva para constatar que el  número, material y calibres de los artefactos coinciden con lo aprobado previamente, y verificar su colocación, entre otros aspectos.