l grave accidente registrado el pasado 30 de junio, en el que falleció una mujer de 50 años y el exalcalde de Villarcayo, Miguel de Lucio, quedó gravemente herido, ha despertado la reivindicación de una autovía que comunique la comarca con Vizcaya por el puerto del Cabrío. Casi 6.000 personas, exactamente 5.865 al cierre de esta edición, habían firmado anoche, la petición de la plataforma Change.org, que si bien estaba activa desde el fatídico año 2016, ha multiplicado exponencialmente las firmas recogidas con este último siniestro.
Este tramo de la CL-629 y el contiguo de la N-629 que han de sortear quienes viajan hacia Vizcaya desde Medina de Pomar, Villarcayo o Espinosa de los Monteros, alcanzó la triste cifra de cinco fallecidos en 2016. El propio De Lucio promovió una concentración ante las puertas del Ayuntamiento de Villarcayo para reclamar a la Junta de Castilla y León que frenara la «sangría de muertes». En cada campaña electoral se reactiva el debate político sobre esta vía de comunicación que se pregunte a quien se pregunte en Las Merindades se considera «vital» o «fundamental».
El mapa de tráfico de las carreteras dependientes de la Junta de Castilla y León indica que en 2017 la CL-629 registró una media de 7.193 vehículos diarios entre Villasana y el límite con Vizcaya y 4.380, a la altura del aforador de Bercedo de Montija. Ninguna vía de comunicación convencional de la provincia dependiente de la Junta registra estas cifras. Solo la autovía a León y otras de más de un carril por sentido del cinturón que rodea la capital se sitúan por encima. La autovía a León alcanza los 11.324 vehículos hasta Villanueva de Argaño y después baja a 8.872.
DB ha consultado a los equipos de gobierno de los municipios más poblados de la comarca y todos coinciden en la importancia de esta reivindicación. Desde el Valle de Mena, el portavoz municipal, el socialista David Sáinz Aja, se muestra a favor de la autovía, pero mientras llega aboga por «solicitar mejoras en la carretera actual». Un carril para vehículos lentos desde Santecilla al alto de Gijano, otro desde Villanueva de Mena hasta el alto de Barrasa y completar el carril de lentos hasta coronar la subida del puerto del Cabrío serían algunas de las que apunta, además de mejorar el trazado en Vivanco. Rediseñar intersecciones que se han cobrado vidas y redimensionar la rotonda de la entrada principal a Villasana son otros apuntes del edil, quien critica como «la Junta ha mejorado la seguridad vial solo con restricciones de la velocidad y de adelantamiento». Los cambios en la señalización que han ido produciéndose en la última década en esta carretera, muchas veces tras accidentes mortales, hacen que cuente nada menos que con 7 kilómetros de línea continua entre el alto del Cabrio y las cercanías de Villasana de Mena.
Sáinz Aja lamenta que recién firmado contrato de conservación de las carreteras regionales del norte de Burgos «haya sufrido una baja de adjudicación de alrededor del 40%», lo que conlleva que «ya partimos con un pobre presupuesto para realizar las operaciones de corrección de deterioros rutinarios».
El alcalde medinés, el socialista Isaac Angulo, indica que, «si no puede ser una autovía, que se habilite una vía rápida», aunque desde su punto de vista una autovía implicaría «más seguridad y el desarrollo económico de la comarca», inexorablemente ligada al turismo residencial que llega de Vizcaya. «Ponerse de acuerdo todos los ayuntamientos y forzar a nuestros grupos políticos en las Cortes regionales para que apuesten por este proyecto», es su planteamiento.
Mientras, el alcalde de Villarcayo, el independiente Adrián Serna, comparte la importancia de esta petición y defiende que «si estamos de acuerdo los 25 alcaldes de Las Merindades deberíamos de pedirlo entre todos». «Debemos de coger el testigo de esas 6.000 firmas y como representantes públicos reivindicar lo mismo que los ciudadanos porque es muy necesaria y muy muy importante esta autovía». Serna añade como los usuarios de esta vía son en gran medida los visitantes de la comarca, pero también «muchos vecinos de la comarca que trabajan en Vizcaya» y cada día transitan por ella, tanto desde el Valle de Mena como desde otros puntos más alejados.
En la misma línea, el alcalde de Espinosa de los Monteros, Javier Fernández-Gil, aboga porque «todos los alcaldes, no solo los de Medina, Villarcayo o Espinosa, sino todos, sin dejar a ningún municipio al margen, nos reunamos y saquemos adelante una propuesta para solicitar esta autovía que es vital». Para el regidor de Ciudadanos, la «pluralidad» política que existe en estos momentos en los ayuntamientos de la comarca debería aprovecharse para reflejar como «la autovía a Bilbao es una demanda de todos». A su juicio, «esta comarca se está quedando estrangulada por las malas comunicaciones».
Pese a todo, el delegado de la Junta en Burgos, Baudilio Fernández-Mardomingo, señaló ayer que «no tenemos programada una autovía en este tramo de la CL-629».