Javier Lacalle había asegurado el luens que había trasladado a la empresa de derribos el deseo de conservar la entrada del viejo hospital. Sin embargo, para sorpresa de casi todos, a última hora de la mañana de ayer las máquinas la echaban abajo El doctor Martín de Frutos, padre de la idea con otros médicos, se mostró «disgustado» por la demolición tras acudir a ver el estado de las obras.